
Carlos Slim Helú caminó con paso firme por los pasillos de Palacio Nacional la tarde de este jueves. Lo esperaban Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, y una docena de los empresarios más influyentes del país, entre ellos Francisco Cervantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Daniel Servitje de Grupo Bimbo y Antonio Chedraui de Grupo Comercial Chedraui. La cita era clara: acelerar el “Plan México” en un momento en que la economía global enfrenta tensiones y los aranceles estadounidenses golpean a las exportaciones nacionales.
“Recibimos en Palacio Nacional a empresarias y empresarios; están optimistas por la situación económica de México y comprometidos con nuestro país”, escribió Sheinbaum en su cuenta de X tras el encuentro.
En la sala, también se encontraban Altagracia Gómez Sierra, coordinadora del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización de Empresas; Salvador Daniel Kabbaz de Fibra Danhos; Guadalupe de la Vega de Grupo de la Vega; y Juan Pablo del Valle de Orbia, entre otros. Del lado del gabinete federal, acudieron Rosa Icela Rodríguez (Gobernación), Marcelo Ebrard (Economía), Luz González Escobar (Energía) y Edgar Amador Zamora (Hacienda).
“Es momento de que su compromiso con México se note”
En un clima de diálogo, Sheinbaum dejó en claro la postura del gobierno: la inversión privada es esencial para consolidar el “Plan México” y enfrentar el panorama de desaceleración global. “Hay muchas áreas de inversión donde ya tienen participación, pero hay otras en las que es importante que generen cadenas de valor con pequeñas y medianas empresas”, explicó la mandataria.
La presidenta destacó que México mantiene estabilidad económica con un peso fuerte, finanzas públicas sanas y una inversión pública cercana a los 800 mil millones de pesos para este año, además de una cifra similar en programas de bienestar. Sin embargo, subrayó: “Es muy importante que se potencie la inversión privada”.
Los empresarios, listos para “apretar el paso”
Antes de ingresar, Francisco Cervantes, presidente del CCE, confirmó que el objetivo era discutir los avances del “Plan México” y acordar medidas para acelerar las inversiones. “Muy bien, muy bien. Vamos a apretar más para que avance más”, afirmó Cervantes.
Los asistentes plantearon preocupaciones sobre la lentitud en la emisión de permisos, un punto que la presidenta reconoció y prometió agilizar “dentro del marco de la ley” para facilitar la llegada de nuevas inversiones.
El impulso de Multiva y el sector farmacéutico
En sintonía con el “Plan México”, Multiva anunció una inversión de 8.900 millones de dólares en proyectos de infraestructura para los próximos tres años, abarcando sectores estratégicos como energía, movilidad, agua e inmobiliario. Además, destinará 36 millones de dólares para fortalecer su plataforma tecnológica y renovar su identidad corporativa.
Tamara Caballero, directora general de Multiva, explicó que este enfoque está basado en el “conocimiento profundo” de los sectores clave del país. Este modelo de negocio ha llevado a la entidad a un crecimiento de doble dígito en préstamos, depósitos e ingresos, lo que permitió que Fitch Ratings mejorara su perspectiva de “estable” a “positiva”.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, también informó durante el encuentro que cuatro empresas farmacéuticas —Kener, Genbio, Alpharma, Biogentec y Neolsyn— invertirán más de 560 millones de dólares en México, fortaleciendo la producción nacional de medicamentos y avanzando hacia la autosuficiencia en el sector salud, un componente clave del “Plan México”.
¿Qué es el “Plan México”?
Presentado en enero de 2025, el “Plan México” busca consolidar al país como líder regional en desarrollo económico, reducir importaciones, fortalecer el mercado interno y enfrentar las políticas arancelarias de Estados Unidos mediante el impulso de inversión privada y pública, la creación de cadenas de valor y la relocalización de industrias clave (nearshoring).
Durante una gira en Canadá en junio, Sheinbaum expuso el plan a empresarios canadienses, con el objetivo de atraer inversión extranjera directa y posicionar a México como destino confiable para capital global en medio de tensiones comerciales.
La estrategia incluye incentivos fiscales y apoyo legal para sectores estratégicos como electromovilidad, semiconductores, dispositivos médicos, energía limpia y agroindustria, mientras se desarrollan 11 hubs de inversión y 14 zonas económicas especiales para descentralizar el crecimiento.
México alcanza récord histórico de inversión extranjera en 2025
Los resultados comienzan a reflejarse: en el primer trimestre de 2025, México alcanzó un récord histórico de 21 mil 400 millones de dólares en inversión extranjera directa (IED), un crecimiento de entre 5% y 9% frente al mismo periodo de 2024. De este total, nuevos proyectos sumaron cerca de 1.590 millones de dólares.
Estados Unidos encabeza la lista de inversores con 38.7% del total, seguido por España, Países Bajos, Canadá y Alemania. La manufactura capta más del 40% de la IED, mientras que servicios financieros absorben un 24%.
Geográficamente, la Ciudad de México concentra el 55% de la inversión, seguida por Nuevo León (13%), Estado de México (9%), Baja California (4%) y Guanajuato (3%), consolidando la tendencia del nearshoring que atrae a empresas globales que reubican sus operaciones en México por su cercanía con el mercado estadounidense.
Un mensaje claro: “Inviertan en el país”
La presidenta Sheinbaum cerró el encuentro con un mensaje contundente a los líderes empresariales presentes: “Inviertan en el país”. Subrayó que, si bien no hubo una petición específica en la reunión, expuso el panorama económico y las oportunidades para potenciar sectores estratégicos, fortalecer la infraestructura y fomentar el bienestar social.
“En estos momentos, su compromiso con México debe notarse más”, recalcó, recordando que los aranceles de Estados Unidos impactan en la economía nacional, pero que el consumo interno y la estabilidad macroeconómica siguen sólidos.
El siguiente paso: traducir compromisos en resultados
Con las inversiones de Multiva, la apuesta del sector farmacéutico y el respaldo de empresarios como Carlos Slim, el “Plan México” avanza en su objetivo de consolidar un modelo económico que combine crecimiento con justicia social y sostenibilidad.
La presidencia y el sector privado acordaron mantener mesas de trabajo permanentes para atender temas como energía, simplificación de trámites y atracción de inversiones, mientras se impulsa el desarrollo de cadenas de valor con pequeñas y medianas empresas, un eje fundamental para democratizar los beneficios del crecimiento económico.
Mientras tanto, los pasillos de Palacio Nacional retuvieron las conversaciones de una tarde que definirá el ritmo de las inversiones en México para los próximos años. En ese salón, entre compromisos, cálculos y miradas atentas, se decidió algo más que acelerar un plan: se trazó la ruta para demostrar que México puede fortalecerse, crecer y resistir los embates de un mundo en crisis sin renunciar a su esencia.