Los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa se encontraban en Iguala, Guerrero, con la intención de tomar por la fuerza autobuses para asistir a una protesta en la Ciudad de México. Sin embargo, fueron interceptados por la policía local en colaboración con el crimen organizado. Desde entonces, la versión oficial, presentada en el Gobierno anterior, afirmaba que los normalistas habían sido asesinados y sus cuerpos incinerados en un basurero en Cocula. No obstante, esta "verdad histórica" ha sido desmontada por expertos y por los propios familiares, quienes exigen respuestas y justicia.
Durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se prometió esclarecer los hechos, pero los resultados han sido decepcionantes. A pesar de la creación de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, encabezada por Alejandro Encinas, los avances han sido mínimos. En reiteradas ocasiones, el presidente ha reconocido que la investigación no ha progresado como se esperaba. En su carta a los padres de las víctimas, López Obrador confesó que las pocas pistas obtenidas se han visto frustradas por la falta de colaboración de algunos involucrados, dificultando aún más el esclarecimiento del caso.
AMLO manda mensaje a los padres de los 43 normalistas a 10 años de la desaparición forzada
— Político MX (@politicomx) September 26, 2024
“Manifestar mi solidaridad con las madres y los padres de los jóvenes Ayotzinapa, que hoy se cumplen 10 años de la desaparición de los jóvenes. Estamos trabajando para encontrarlos y, como… pic.twitter.com/tRnHirnOXw
Uno de los temas más controvertidos que ha surgido en torno a la desaparición de los normalistas es la posible participación del Ejército. La periodista Anabel Hernández ha sostenido que el 27 Batallón de Infantería pudo haber estado directamente involucrado en la desaparición, actuando bajo las órdenes de un narcotraficante que intentaba recuperar un cargamento de droga. Esto plantea interrogantes sobre la relación entre las fuerzas armadas y el narcotráfico en México, así como la falta de responsabilidad de las instituciones encargadas de velar por la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
El abogado Vidulfo Rosales, representante de los padres de los normalistas, ha afirmado que existe una clara negación de la verdad por parte de las autoridades, y que el Estado sigue siendo el responsable de la impunidad en este caso. La falta de información clara ha generado un sentimiento de frustración y desconfianza entre los familiares, quienes ven cómo se acumulan los rumores y las versiones contradictorias, mientras la verdad sigue oculta.
A medida que pasa el tiempo, los familiares de las víctimas continúan exigiendo justicia. La desesperanza y la resignación no pueden ser una opción. Como sociedad, debemos acompañar a los padres de los normalistas y sumar nuestras voces a su demanda de verdad y justicia. No podemos permitir que el caso de Ayotzinapa se convierta en un recuerdo borroso en la memoria colectiva de México, ni que la historia repita otros episodios de violencia y desaparición que han marcado a tantas familias a lo largo de los años.
Esta es la carta que AMLO envió a los padres de los 43 normalistas
— Político MX (@politicomx) September 25, 2024
"Me propuse con toda convicción destinar tiempo, recursos y voluntad para esclarecer los trágicos hechos acontecidos, castigar a los responsables y sobretodo encontrar a los jóvenes. Les aseguro que nunca… pic.twitter.com/KWpcDhspro
Este décimo aniversario no solo es un recordatorio del dolor y la injusticia, sino también un llamado a la reflexión sobre el estado de nuestro país. ¿Cuántos años más deben pasar para que se conozca la verdad detrás de la desaparición de los 43 normalistas? ¿Cuántas vidas más tienen que perderse debido a la impunidad y la corrupción? Es hora de que la sociedad despierte y exija que se tomen acciones concretas. Es hora de exigir un México donde la verdad y la justicia prevalezcan, y donde casos como el de Ayotzinapa nunca se repitan. La memoria de los normalistas desaparecidos merece ser honrada, y su búsqueda de justicia es una tarea que nos incumbe a todos.
Hoy, más que nunca, los 43 normalistas siguen faltando, y la lucha por la verdad y la justicia continúa. ¡No debemos olvidar!