
La figura de Rafael Caro Quintero volvió al centro del debate judicial en Estados Unidos. El fundador del Cártel de Guadalajara, señalado como responsable del secuestro y asesinato del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena, deberá esperar un mes más para conocer la postura de la Fiscalía sobre las condiciones en que permanece recluido.
El Departamento de Justicia estadounidense, a través del fiscal federal Joseph Nocella, solicitó al tribunal una prórroga hasta el 15 de septiembre de 2025 para responder a la moción presentada por la defensa del capo, quien pide la modificación de las estrictas Medidas Administrativas Especiales (SAMs) a las que está sometido desde su llegada a una cárcel metropolitana en Brooklyn, Nueva York.
La moción de la defensa
El pasado 8 de agosto, los abogados de Caro Quintero presentaron un escrito ante la Corte Federal de Brooklyn en el que denunciaron las condiciones de aislamiento extremo que enfrenta su cliente. Según el documento, el exlíder del Cártel de Guadalajara permanece 23 horas al día en una celda pequeña y sin ventanas, sin contacto con otros reclusos y con severas restricciones para comunicarse tanto con sus familiares como con sus propios defensores.
La defensa calificó estas medidas como un “castigo por adelantado” aplicado a una persona que aún no ha sido condenada, además de considerar que violan sus derechos constitucionales. El escrito también alertó que la situación pone en riesgo su salud física y emocional, y pidieron al juez federal levantar el régimen de aislamiento.
Argumentos del Departamento de Justicia
El fiscal Joseph Nocella justificó la prórroga al señalar que una eventual respuesta requiere de la coordinación de diversas instancias, entre ellas la Oficina de Prisiones, el Centro Metropolitano de Detención y la Oficina de Operaciones de Cumplimiento.
En el escrito entregado al tribunal, los fiscales informaron que consultaron con el equipo legal de Caro Quintero, quienes dieron su consentimiento a la extensión solicitada.
Audiencia fijada para septiembre
El juez Frederic Block, a cargo del proceso, aceptó la petición de la Fiscalía y determinó que será el próximo 18 de septiembre de 2025, a las 11 de la mañana, cuando se realice una audiencia para debatir si procede modificar las condiciones de encarcelamiento.
Este nuevo plazo se suma a la fecha original que había sido marcada para el 18 de agosto, cuando debía resolverse la solicitud de la defensa.
Un proceso en desarrollo
Caro Quintero enfrenta cargos por crimen organizado, tráfico de drogas y posesión de armas de fuego en Estados Unidos, además del señalamiento histórico por el asesinato de Camarena en 1985. Su caso avanza en paralelo a la entrega de pruebas y preparación de juicio.
En este contexto, la defensa logró en días recientes que la Fiscalía de EE. UU. descartara la pena de muerte como castigo en el proceso, lo que ha sido interpretado como una apertura a eventuales negociaciones entre ambas partes.
Paralelismo con otros capos
El trámite coincide con la situación de Ismael “El Mayo” Zambada, líder histórico del Cártel de Sinaloa, quien recientemente aceptó declararse culpable y renunciar a su derecho a juicio, después de que los fiscales también se desistieron de pedir la pena capital en su contra.
La decisión pendiente sobre Caro Quintero podría marcar un precedente sobre el grado de flexibilidad que la justicia estadounidense estaría dispuesta a conceder a los capos mexicanos extraditados.
Por ahora, el fundador del Cártel de Guadalajara seguirá bajo el régimen de aislamiento, a la espera de que el próximo 18 de septiembre el tribunal de Brooklyn determine si se mantienen o modifican las condiciones de su encierro.