
Fue el 4 de octubre de 2024, en el estado de Oaxaca, cuando Sandra Estefana Domínguez Martínez, defensora de Derechos Humanos, y su esposo, Alexander Hernández Hernández, fueron vistos por última vez.
Los familiares acudieron a la Fiscalía General de Oaxaca para levantar las fichas de desaparición correspondientes. En ellas se puede leer que Sandra tenía en aquel entonces 38 años mientras que su pareja 46; ambos desaparecieron en María Lombardo de Caso, municipio de San Juan Cotzocón, Oaxaca.
Este mes de abril, poco más de 6 meses después, la pareja fue localizada sin vida en una fosa clandestina. La fiscalía detalló que los cuerpos fueron encontrados con disparos de arma de fuego en dos fosas durante un operativo realizado el jueves 24 de abril en un inmueble ubicado en un camino de terracería en La Ceiba a Unión Progreso, precisamente en Veracruz.
Las líneas de investigación que sigue la Fiscalía de Oaxaca apuntan a que fueron integrantes de células delictivas que operan en Veracruz, principalmente, las responsables de la desaparición de las víctimas. Según adelantaron autoridades, la pareja asesinada habría sido víctima de un pleito entre criminales, lo que derivó en sus muertes como presunto daño colateral.