
Pascal Soriot, director ejecutivo del grupo, en una conferencia en línea, aseguró que para finales de año o principios del próximo se podría tener una vacuna, indicando que dependerá de la rapidez con que los reguladores autoricen la reanudación de las pruebas.
“Todavía podríamos tener una vacuna para finales de este año o principios del próximo”, dijo.
Debido a una enfermedad hasta ahora “inexplicada” en uno de sus participantes, tuvo que detener sus ensayos clínicos, siendo uno de los proyectos más avanzado y que tiene grandes expectativas para la vacuna contra el Covid-19.
Se encuentran analizando si esto puede corresponder a un efecto secundario de la vacuna y las autoridades reguladoras no autorizarán la reanudación de la investigación hasta que no lo descarten.
La farmacéutica señaló el miércoles que ya hubo una interrupción hace unos meses por un caso similar, sin embargo los ensayos pudieron continuar con rapidez.“En AstraZeneca ponemos la ciencia, la seguridad y los intereses de la sociedad en el centro de nuestro trabajo. Esta pausa temporal es la prueba de que seguimos esos principios, mientras un único caso en uno de nuestros centros de ensayo es evaluado por un comité de expertos independientes" señaló el director.
Además dijo que el comité les dirá la fecha en que los ensayos podrían reanudarse y continuar con los ensayos.
“Ese comité nos guiará en cuanto a la fecha en que los ensayos podrían reiniciarse, para que podamos continuar nuestro trabajo lo antes posible".
La vacuna de AstraZeneca es una delas nueve en todo el mundo que se encuentran actualmente en ensayos en humanos de fase 3 en etapa tardía. Llamada AZD1222 usa una versión debilitada de un adenovirus común que causa el resfriado diseñado para codificar la proteína de pico que usa el nuevo coronavirus para invadir las células.
La proteína se produce dentro del cuerpo humano, luego de haber recibido la vacuna, lo que prepara al sistema inmunológico para atacar el Covid-19 si la persona se infecta posteriormente.