
A lo largo del tiempo, se ha satanizado el consumo del huevo; por un lado, unos opinan que se trata de un alimento milagroso y, por el otro, hay quienes piden eliminarlo de las dietas por su alto nivel de colesterol, lo que se traduce a una falta de información, señaló el especialista Gregorio Benítez Peralta.
“Muchas personas al escuchar que el huevo era alto en colesterol pidieron borrar este producto de cualquier menú, sin entender bien qué es el colesterol, su importancia para el buen funcionamiento del organismo y, muy probablemente, ignorando que nuestro cuerpo lo produce y en mayor cantidad del que ingerimos”, explicó.
Mediante la gaceta de la Universidad Nacional Autónoma a de México (UNAM), el profesor de la Facultad de Medicina explicó que el consumo de huevo aumenta los índices de HDL, una lipoproteína que transporta al colesterol desde los tejidos hasta el hígado donde es eliminado.
“Si bien hubo décadas donde las autoridades desaconsejaban consumir huevos por miedo a abrirle la puerta a los padecimientos cardiovasculares, hoy instituciones como la American Heart Association buscan promover su ingesta”, refirió.
Benítez Peralta indicó que en algunas ocasiones desayunar huevo podría aumentar el riesgo de enfermedades vasculares, pero no por los huevos en sí, sino por el tocino, mantequilla y demás cosas con que las que se acompañan.
El especialista señaló que, mientras el consumo anual promedio en el planeta es de 9.19 kilos per cápita, en México la cifra se eleva casi al doble con 18.34 kilogramos por individuo.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) destacó que México se ubica como el principal consumidor de huevo, y con el objetivo de cubrir la demanda nacional, se producen cada año 2.77 millones de toneladas.
La dependencia destacó que lo anterior permite que esta actividad sea rentable para todos los productores nacionales, sin embargo, Jalisco, Puebla y Sonora son las entidades que destacan por su mayor aportación a la producción total.
En su revista Agricultura Mexicana, la Sader explicó que la producción de huevo para plato es una de las actividades más importantes en el país, tanto en el ámbito económico como en el consumo.
Anualmente, un mexicano se come 345 huevos, el equivalente a unos 226 kilos, lo que lo vuelve el país donde más se consume este producto, indicó.
Esta actividad, precisó, contabiliza la existencia de 202 millones de aves para la producción de huevo, mejor conocidas como aves de postura, en todo el país.
De esta forma, México se sitúa como el cuarto productor de huevo a nivel mundial, aporta uno de cada 27 huevos producidos en el mundo; en el país, hay gran cantidad de pequeños y medianos productores dedicados, a través de la avicultura de traspatio, a la producción de huevo.
Fuente: Notimex