
El estudio de medicamentos preexistentes permitió revalorar el potencial activo de sus componentes al momento de interactuar con las proteínas amiloides y tau tóxicas, las cuales se encuentran asociadas directamente con el alzhéimer.
Posteriormente fueron recopilados los datos médicos de 7 millones de personas que utilizaban frecuentemente el Viagra como tratamiento para la disfunción eréctil. El resultado fue impactante, pues se demostró que estos pacientes tienen 69% menos posibilidades de desarrollar dicho padecimiento. Luego de ello, fueron realizados más estudios que revelaron el crecimiento de células cerebrales para quienes recurrían muy a menudo a dicho fármaco.
De acuerdo con ‘Business Insider’, otra investigación efectuada por parte de Harvard también señaló la importancia de este medicamento como alternativa para reducir la acumulación de proteínas tóxicas, pues está estrechamente relacionada con el alzhéimer.
Hasta el momento este fármaco aún sigue siendo investigado debido a que todavía falta determinar la relación causal Viagra-alzhéimer, así como la autorización de un especialista para que pueda ser empleado este tipo de tratamientos experimentales.