
Ante esto, el gobierno de México no podrá dar inicio a las obras de la Fase 1 en dicho tramo, a pesar de que se cuenta con una autorización de impacto ambiental por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
Más de 100 comunidades indígenas, campesinas, costeras y urbanas de las zonas de Campeche, Yucatán y Quintana Roo han recibido el amparo por parte del Juzgado Primero de Distrito. Con este se impedirá que se realicen obras nuevas en el Tramo 2 durante el juicio correspondiente.
De acuerdo con ‘El Universal’, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) y el Consejo Regional Indígena y Popular de Xpujil (CRIPX) señalan que esta resolución permitirá que se realice el proceso judicial sin obras que puedan generar daños irreparables.
En el amparo, el colectivo y las organizaciones que lo interpusieron señalan que han decidido ejercer su derecho de acceso a la justicia puesto que se han violado sus derechos humanos, así como el acceso a un ambiente sano, el cual se ha visto vulnerado “por los graves impactos ambientales y sociales del proyecto integral Tren Maya”.
Hacemos un llamado respetuoso al Poder Judicial mantener y ejecutar la suspensión definitiva, pues sólo de esta forma se garantiza el respeto de nuestros derechos humanos”.
La Fase 1 del Tren Maya cubre 631.25 kilómetros, los cuales van de Palenque, Chiapas a Izamal, Yucatán, se encuentra dividido en tres tramos: Palenque-Escárcega, Escárcega-Calkiní y Calkiní-Izamal. Contará con 13 estaciones ferroviarias, así como 146 pasos vehiculares, 24 viaductos, 3 bases de mantenimiento, 40 pasos de fauna y dos estaciones de carga ubicadas en Campeche y Candelaria.
Personas de comunidades indígenas, campesinas, urbanas y costeras de los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, así como OSCs, obtuvieron en días pasados la suspensión definitiva relacionada con el amparo en contra del proyecto #TrenMaya. https://t.co/Idq1s4y8Np pic.twitter.com/SHGMmvCuto
— CEMDA (@CEMDA) December 7, 2020