
El cocodrilo estaba ahí, a un lado del canal, con la cola arrastrando entre el lodo que dejaron las lluvias. Un niño de 13 años, vecino de la colonia Candelario Garza en Ciudad Madero, decidió sujetarlo con una cuerda, intentando controlarlo mientras el animal se resistía. El reptil medía más de dos metros.
Minutos después, llegaron elementos del cuerpo de Bomberos. El menor entregó al cocodrilo y los rescatistas aseguraron al animal, que fue trasladado para su reubicación en un sitio seguro.
El caso se registró tras varios días de lluvias intensas en el sur de Tamaulipas, que provocaron el desbordamiento de ríos y canales. Estos desbordamientos han llevado a los cocodrilos a salir de las lagunas en busca de zonas más altas, ingresando a calles, patios y avenidas de Ciudad Madero, Tampico y Altamira.
Jesús Germán Ponce Sánchez, comandante del Cuerpo de Bomberos de Ciudad Madero, explicó que la presencia de cocodrilos en zonas urbanas no es un hecho aislado. Indicó que, en las últimas semanas, se han asegurado más de 150 cocodrilos, entre crías y ejemplares adultos, y que los reportes de avistamientos llegan todos los días.
El comandante reconoció que muchas personas ven la captura de un cocodrilo como un acto de valor, pero insistió en que es un riesgo innecesario. “Incluso un cocodrilo pequeño puede causar lesiones graves si se siente amenazado”, señaló. También recordó que la Ley General de Vida Silvestre prohíbe la captura de fauna silvestre sin autorización y que las personas que incurran en estas prácticas pueden ser sancionadas con multas o enfrentar consecuencias legales.
Las autoridades insisten en pedir a la gente que no intente atrapar cocodrilos ni a ningún otro animal silvestre por su cuenta. Si alguien ve uno de estos reptiles caminando por la calle o en un patio, lo correcto es llamar de inmediato al 911 o avisar a fundaciones como “Cocodrilo SOS”, que trabajan junto a la PROFEPA y Protección Civil para capturarlos de forma segura, evitando riesgos tanto para las personas como para los propios animales.
La temporada de lluvias continuará y se espera que los avistamientos continúen en la zona conurbada. Mientras tanto, el llamado es a mantener la calma, reportar y evitar cualquier contacto con estos animales.
El menor de 13 años que atrapó al cocodrilo en Ciudad Madero resultó ileso, pero la historia pudo haber terminado de otra manera. Para los rescatistas, lo importante es que la ciudadanía comprenda que, aunque parezca un acto de valentía, intentar controlar a un cocodrilo con una cuerda no es seguro ni legal.