
Natalie Kitroeff y Paulina Villegas documentaron esta noticia sobre lo que pasa con los mexicanos en este tiempo de pandemia.
De acuerdo con el medio, un Suzuki gris se detuvo frente al Hospital General de México, y dejó a Víctor Bailón en la entrada, quien se había negado a ir al hospital durante días, pues aseguraba que los médicos estaban matando a pacientes con Covid-19.
“¡Papito, respira!”, su esposa gritó, “Por favor, respira”. En una hora, el Sr. Bailón estaba muerto.
Recordaron el caso de la epidemia por Ébola en Sierra Leona durante el 2014, la cual señalaron que en México ocurre algo similar, pues la pandemia aplasta un sistema de salud previamente débil, muchos mexicanos perciben la sala de atención para casos de Covid-19 como un destino mortal y que debe ser evitado.
Las periodistas consultaron a epidemiológicos, y según ello combatir la enfermedad en casa provoca que la enfermedad se esparza con mayor amplitud, además de que esconde el verdadero alcance de la pandemia, ya que muchas personas mueren sin ser diagnosticadas con el Covid-19.
Según el reportaje, en Nueva York, menos del 25 por ciento de los pacientes murieron en hospitales, y en la Ciudad de México cerca del 40 por ciento de las personas hospitalizadas por Covid-19, mueren.
Según doctores consultados por las periodistas, señalan que más personas sobrevivirían al virus si se atendieran a tiempo, ya que la tardanza en buscar asistencia médica provoca más muertes en hospitales, y así más temor en los mismos.
Según el registro oficial, México tiene más muertes por Covid-19 que otro país, excepto Estados Unidos y Brasil.
El hermano de Bailón, José Eduardo, quien recientemente había pasado 60 días en su casa recuperándose de su propio ataque con lo que él cree que fue el Covid-19, dijo “Prefiero quedarme en casa y morir allí”.
“Después de ver videos de lo que les sucede a las personas dentro de los hospitales, al diablo con eso”, mencionó.
Casi el 70 por ciento de los mexicanos dijeron que se sentirían “inseguros” al llevar a sus seres queridos al hospital durante la pandemia, en una encuesta publicada el mes pasado. Un tercero dijo que preferiría cuidar a sus familiares ellos mismos.
Las periodistas señalan que, dos días antes de morir Víctor Bailón, acudió a una clínica local y sus niveles de oxígeno en la sangre resultaron bajos, por lo que le pidió a su esposa, Fabiola Palma Rodríguez, que no lo llevará a un hospital.
Hasta el día de ayer, la Secretaría de Salud, informó que hay registro de 52 mil 298 muertes y 480 mil 278 casos de Covid-19.Mexico is battling one of the worst coronavirus outbreaks in the world, with more than 52,000 confirmed deaths, the third-highest toll of the pandemic. And its struggle has been made even harder by a pervasive phenomenon: a deeply rooted fear of hospitals.https://t.co/tjqRfe5aew
— The New York Times (@nytimes) August 10, 2020