Fátima Bosch, recién coronada Miss Universo 2025 llegó el pasado domingo al Aeropuerto Internacional Liberty de Newark, en Nueva Jersey, Estados Unidos, donde fue recibida por un grupo de miembros de la comunidad mexicana radicada en la zona. Entre bailes tradicionales, banderas y mariachi, la joven mexicana saludó personalmente a los asistentes y agradeció las muestras de cariño en un ambiente que combinó celebración cultural y orgullo por su triunfo. Este recibimiento se organizó en conjunto entre la comunidad mexicana en Nueva York y el equipo de Miss Universo.
A su llegada también la esperaba la prensa, que no tardó en preguntarle por las acusaciones de supuesto fraude en su coronación. Dichos señalamientos surgieron luego de que Omar Harfouch, ex juez del certamen, afirmara que la corona había sido “comprada”, insinuando vínculos empresariales entre el copropietario de Miss Universo, Raúl Rocha Cantú, y Petróleos Mexicanos (Pemex), donde el padre de Bosch habría trabajado como asesor. Bosch negó tajantemente las acusaciones y afirmó que “todo lo que se ha dicho es completamente falso”, además de señalar que su triunfo generó polémica por romper estereotipos y moldes dentro del certamen.
La Miss Universo también destacó que el trabajo no se limita a la presentación final en el escenario, sino que implica un año de compromiso con causas sociales, políticas públicas y representación internacional. Recordó que todo cuenta “desde el primer día en la concentración: cómo tratas a las personas, a quienes brindan un servicio y a tus compañeras” subrayando la responsabilidad global del título.
Mientras tanto, en redes sociales se viralizó un debate sobre el reducido número de seguidores que acudieron a recibirla en Newark comparándolo con las grandes recepciones de otras figuras públicas o de otras Miss Universo de años previos. Usuarios en X señalaron la diferencia entre la polémica mediática que ha rodeado su coronación y la asistencia relativamente baja en su llegada.
En los próximos días, Bosch cumplirá una agenda de actividades en Nueva York, que podría incluir una visita al Consulado General de México, encuentros con la comunidad mexicana residente y una posible aparición en la sede de las Naciones Unidas, además de actos culturales y compromisos institucionales previstos por la organización.
La controversia en torno a su coronación sigue generando atención. Aún así, Bosch ha reiterado su posición y su compromiso con las causas sociales que acompañan a su reinado, señalando que Miss Universo “es un trabajo de un año entero” y que representa a mujeres de México y de todo el mundo.