En las inmediaciones del Estadio Alfredo Harp Helú, aficionados han denunciado un nuevo esquema de estafa realizado por supuestos acomodadores que operan antes de la entrada oficial al estacionamiento. De acuerdo con los reportes, los sujetos se acercan a los automovilistas para entregar un falso “boleto” o marcar el vehículo con plumón, pidiendo un pago de 200 pesos para permitir el acceso. Sin embargo, una vez dentro del recinto, el personal del estadio informa que el cobro legítimo del estacionamiento se realiza únicamente al interior, lo que obliga a los asistentes a pagar dos veces.
El problema generó indignación debido a que estas estafas ocurren incluso frente a elementos policiacos asignados a la zona, lo que ha despertado dudas sobre una posible colusión con los llamados “viene viene”. Las quejas señalan que los agentes no intervienen, incluso cuando el supuesto estafador actúa a escasos metros de ellos.
Este tipo de engaños no son recientes: en 2019 ya se habían registrado denuncias similares, con aficionados que compraron “boletos de estacionamiento” falsos y se encontraron con que, al llegar, las plazas estaban saturadas o requerían un cobro distinto al prometido. Esa versión antigua del fraude había generado alertas entre medios y autoridades, pero evidentemente no se logró erradicar por completo, ya que la práctica reapareció en 2025.
La alcaldesa de Iztacalco, María de Lourdes Paz, reconoció públicamente la gravedad del problema, señalando que estas prácticas son frecuentes en los alrededores de recintos de espectáculos en la Ciudad de México. Tras las denuncias recientes, aseguró que la alcaldía mantiene operativos permanentes contra franeleros, con más de 300 remisiones al juzgado cívico, en coordinación con la SSC y la Policía de Investigación. Sobre los policías que no actuaron pese a presenciar la estafa, argumentó que los ciudadanos pueden presentar denuncias ante Asuntos Internos, pero subrayó que la autoridad tiene la obligación de responder adecuadamente.
Aun así, sus declaraciones causaron molestia entre el público cuando sugirió que los asistentes usaran transporte público para evitar fraudes, opinión que no resolvió el problema de fondo. Con el antecedente que desde antes de 2019 se han reportado casos idénticos en el mismo estadio se evidencia que las autoridades han permitido que la problemática persista durante años.