
Ante esto, demócratas y diplomáticos han expresado su preocupación puesto que México es de los principales socios comerciales del país.
Beto O’Rourke, ex miembro demócrata de la Cámara de Representantes señaló que todos los líderes mundiales deberían de reconocer Biden “incluyendo el presidente de nuestro vecino y aliado más importante, México”, de acuerdo con ‘The Hill’.
Asimismo, Joaquín Castro, representante demócrata por Texas, presidente del Caucus Hispano dijo que la decisión del mandatario mexicano fue “decepcionante”.
Nos importa profundamente la relación Estados Unidos-México. Estamos en medio de una pandemia global mortal y la cooperación diplomática con el gobierno de México es primordial. Nuestras economías y millones de familias están interconectadas y seguiremos trabajando para fortalecer la relación”.
Otro representante demócrata cercano a Biden, Filemón Vega, dijo que la decisión de AMLO demuestra “la farsa de presidente que es” puesto que, señala: “demuestra que tampoco cree en la democracia”.
Mientras tanto, Gerónimo Gutiérrez, embajador de México en Estados Unidos en 2017-2018, se dijo desconcertado ante la respuesta del presidente de México.
Estoy seguro de que la administración de López Obrador busca establecer una buena relación con una administración Biden. La decisión del presidente me desconcierta y creo que es equivocada”, menciona ‘The Hill’, de acuerdo con ‘El Universal’.
De igual manera, Andy Levin, quien es considerado favorito para ser el próximo secretario de trabajo señaló que el actuar de Obrador habla más sobre la “volatilidad e inestabilidad de Tump”.
La negativa de AMLO de reconocer los resultado de la elección puede ser un reflejo del deseo de mantener estable nuestra relación en el periodo de ‘pato cojo’. Creo que dice más sobre la volatilidad e inestabilidad de Trump y su administración que de AMLO”.
De acuerdo con ‘El Universal’, también señala que en el capítulo laboral del T-MEC pudieran presentarse roces entre las administraciones AMLO-Biden puesto que el estadounidense podría hacer que México “rinda cuentas sobre sus promesas de reforma laboral”.
Con información de: El Universal