
Harfuch descarta alianza CJNG–Chapitos en medio de guerra interna en Sinaloa
Palacio Nacional se convirtió nuevamente en el escenario donde se cruzaron los ecos de la violencia en Sinaloa con las afirmaciones oficiales. Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, negó este miércoles la existencia de una alianza entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y la facción de “Los Chapitos”, encabezada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, en medio de una guerra fratricida que ha dejado miles de víctimas en la entidad.
La versión oficial
Durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, García Harfuch fue enfático: no existen pruebas que acrediten la unión entre ambos grupos. Reconoció la aparición de narcomantas en las que se afirmaba que el CJNG había ingresado a Sinaloa como refuerzo de “Los Chapitos”, pero aseguró que todo apunta a un engaño para intimidar a facciones rivales.
“No ha habido ninguna detención que confirme esta alianza”, sentenció el secretario frente a los cuestionamientos de la prensa.
El funcionario también descartó que la declaración de culpabilidad de Ismael “El Mayo” Zambada, ocurrida esta semana en Nueva York, signifique el fin del Cártel de Sinaloa. Recordó que la organización nunca tuvo un líder único, sino múltiples ramas: la de Zambada, la de Guzmán Loera, la de sus hijos, así como las de Aureliano “El Guano” Guzmán y de Fausto Isidro Meza Flores, “El Chapo Isidro”.
El trasfondo de la guerra
El juicio y confesión de “El Mayo” en Estados Unidos se entrelazan con la fractura que golpea a Sinaloa desde hace un año. La entrega del capo, traicionado por Joaquín Guzmán López —hijo del “Chapo”—, abrió un frente de batalla entre sus herederos, conocidos como “La Mayiza”, y “Los Chapitos”.
Las cifras son devastadoras: entre septiembre y julio, el conflicto dejó alrededor de 1,600 asesinatos y más de 1,800 personas desaparecidas. Municipios enteros viven paralizados por la violencia, y Culiacán se convirtió en el epicentro del miedo.
En julio, Sinaloa se colocó como la entidad más violenta del país, con 207 homicidios en un solo mes, superando incluso a Guanajuato. De acuerdo con la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública, uno de cada diez asesinatos cometidos en México ocurrió en ese estado.
Las pruebas y los rumores
A finales de julio, la policía decomisó chalecos antibalas con las siglas “CJNG” en Culiacán. Las imágenes circularon en redes sociales y reforzaron la hipótesis de una incursión jalisciense. La DEA, desde Estados Unidos, también apuntó en un comunicado a una posible alianza. Sin embargo, Harfuch desestimó esas versiones y explicó que las mantas y objetos asegurados serían estrategias internas de los mismos grupos sinaloenses para sembrar miedo.
Corrupción y dudas en Palacio Nacional
La sombra de la confesión de “El Mayo” en Brooklyn volvió a aparecer durante la mañanera. El capo declaró haber sobornado durante décadas a policías, militares y políticos mexicanos para garantizar la operación de su organización.
Interrogado al respecto, García Harfuch aseguró que no hay evidencia de que marinos, militares o funcionarios federales actuales hayan recibido dinero del narcotraficante. Un día antes, la presidenta Claudia Sheinbaum había reaccionado con molestia a la misma pregunta: “¿A quién le daba dinero, de acuerdo con lo que planteó? Tendría que haber una denuncia en particular, ¿no?”.
Refuerzos y estrategia de seguridad
En contraste con el clima de violencia, el Gobierno federal presume acciones de contención. El Gabinete de Seguridad entregó 100 patrullas a Sinaloa y firmó un convenio de colaboración con el gobernador Rubén Rocha Moya, que incluye capacitación de policías locales por parte de la Guardia Nacional.
Harfuch detalló que, desde octubre pasado, se han detenido a más de 1,600 personas por delitos de alto impacto, asegurado más de 3,000 armas de fuego y decomisado 64 toneladas de drogas, entre ellas más de una tonelada de fentanilo y 1.8 millones de pastillas. Además, fueron desmantelados 105 laboratorios clandestinos de metanfetaminas.
La presidenta Sheinbaum, por su parte, subrayó que Mazatlán vive una recuperación turística, con un 75% de ocupación hotelera y la llegada constante de cruceros, a pesar de la crisis de violencia.
El choque entre facciones, las versiones encontradas y los decomisos que apuntan a falsos mensajes reflejan la fragilidad de un estado atrapado entre el turismo y la violencia. La caída de “El Mayo” Zambada en Estados Unidos y la condena perpetua de “El Chapo” no han borrado al Cártel de Sinaloa, que sigue fragmentado y en guerra abierta.
En el centro del conflicto, la población de Sinaloa carga con las consecuencias: homicidios diarios, desapariciones y una percepción de inseguridad que convierte a Culiacán en el municipio más temido del país.