
El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, se sabe intocable… Y desde el pedestal de poder que le ha dado la 4-T, dicta lo que es urgente y lo que no… Por ejemplo, admite que la demanda por el desabasto de medicamentos psiquiátricos es legítima, pero acto seguido la desprecia diciendo que es injusto que se lo recuerden en un evento donde él es protagonista… La indolencia criminal del subsecretario es tan grande que sólo se compara con una cosa… Su propia soberbia… La noche del viernes pasado, un grupo de personas que durante los últimos cuatro meses ha padecido la falta de medicamentos para atender enfermedades mentales, irrumpió en un foro donde el subsecretario de Salud era el orador principal… Pero antes de eso hay un apunte crucial… López-Gatell estaba en ese evento tan solo 72 horas después de haber dejado plantada a la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados… La Comisión lo había citado para que explicara, entre otros temas, su propuesta de eliminar 34 Normas Oficiales Mexicanas relacionadas con temas de salud tan graves como el cáncer y el VIH… Y simplemente el subsecretario no fue a la reunión, que ni siquiera era presencial, sino virtual… En el foro en el que participó el viernes hizo referencia al tema diciendo y cito: “Le sacamos más provecho escuchando al pueblo que plantea sus problemáticas, en lugar de escuchar a grupos de intereses económicos que sólo responden a las empresas”… Y como si se tratara de una profecía cumplida, en el lugar estaba un grupo de personas listo para plantear una problemática que el subsecretario lleva meses evadiendo… Miembros del colectivo “Medicamentos para Mentes Libres MX” desplegaron una manta en la que se exigía garantizar el abasto de medicinas para pacientes de enfermedades mentales… Y tomaron el micrófono para acusar que llevan meses sin acceder dignamente a sus tratamientos, pues desde febrero pasado la empresa Psicofarma, que es la mayor abastecedora de este tipo de medicinas, fue castigada por la Comisión Federal Contra Riesgo Sanitarios, la Cofepris, debido a anomalías en la producción… Y sí, las normas sanitarias son algo muy serio y deben cumplirse… Sin embargo, el subsecretario López-Gatell no tenía previsto cómo se iba a subsanar ese hueco que dejaba el castigo a Psicofarma… LA INDOLENCIA CRIMINAL DE UN TAL HUGO | EDITORIAL DE ADELA MICHA