
Ignorar la realidad es un lujo que el presidente López Obrador se ha concedido durante cinco años… Pero eso no lo exime de responsabilidad… Su política basada en la negación sólo aplaza el daño y el sufrimiento de nuestra nación… Así lo demostró ayer, cuando con soberbia, desestimó los datos de la prueba PISA que exhiben la cruenta realidad del panorama educativo… Dos de cada tres niños mexicanos no tienen las competencias básicas en matemáticas… A nivel regional estamos en el sótano en términos escolares… Hemos permitido que se pisotee el futuro de toda una generación…
La prueba PISA es un examen estandarizado que permite medir el estado de la educación en los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, la OCDE… Bueno, pues México está en su peor momento de las últimas dos décadas en todos los parámetros que mide la prueba PISA, o sea comprensión lectora, matemáticas y ciencia… Entre los 38 países miembros, México es el peor evaluado en ciencia… Tan sólo en comparación con la prueba de 2018, la calificación de México en Matemáticas cayó 14 puntos, nueve en Ciencia y cinco en Comprensión Lectora… Estamos hablando de que en lo que va de este sexenio y luego de una pandemia, hemos retrocedido como nunca antes…
El desastre educativo de México está a la vista de todos, de todos menos de un hombre… El presidente López Obrador… El martes, cuando los resultados fueron publicados, la Secretaría de Educación Pública ofreció un pronunciamiento que es vergonzoso… Un comunicado que apesta a mediocridad… Respondieron que las pruebas internacionales estandarizadas no consideran las condiciones reales en las que se desarrolla el trabajo docente… O sea que como PISA mide conocimientos y no el contexto del aprendizaje, entonces es la prueba la que está mal…