
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, arremetió este lunes contra el alcalde de Chicago, Brandon Johnson, luego de que este rechazara públicamente la posibilidad de que la Guardia Nacional sea desplegada en su ciudad, como ya ha ocurrido en Washington D.C. y Los Ángeles.
A través de un mensaje en su red social Truth Social, Trump calificó a Johnson como “incompetente” y desestimó las cifras que este ofreció sobre los operativos en la capital estadounidense.
“El incompetente alcalde de Chicago acaba de declarar que, en Washington, donde el crimen se ha reducido casi a cero, no ha habido asesinatos en nueve días, algo que no ocurría desde hace años, y que la gente vuelve a estar segura; solo nueve personas han sido arrestadas. Eso es incorrecto”, escribió el presidente. Según Trump, “cientos de delincuentes han sido detenidos, capturados y arrestados, y se les han confiscado sus armas”.
La declaración del mandatario fue en respuesta directa a unas críticas emitidas el domingo por Johnson en una entrevista con MSNBC. El alcalde acusó a Trump de haber gastado “cientos de millones de dólares” para realizar apenas “nueve arrestos” en Washington, y cuestionó su capacidad para liderar.
“El presidente ha gastado cientos de millones de dólares, ¿para qué? ¿Arrestar a nueve personas en D.C.? Eso demuestra claramente que no tiene el nivel de conciencia necesario para entender lo que se necesita para gobernar ciudades, y mucho menos todo un país”, señaló Johnson.
La polémica se produce tras el anuncio de Trump, el pasado viernes, en el que insinuó la posibilidad de extender a Chicago el operativo militar desplegado en la capital del país. En respuesta, el alcalde advirtió que su ciudad “no necesita estar en una situación de ocupación militar” y denunció una posible violación de la legalidad.
Según informó en exclusiva The Washington Post, el Pentágono habría estado preparando desde hace semanas el despliegue de varios miles de efectivos de la Guardia Nacional en Chicago. El operativo estaría orientado, supuestamente, a combatir el crimen, además de detener a personas sin hogar e inmigrantes indocumentados, replicando el modelo aplicado en otras ciudades.
Johnson subrayó que una intervención de este tipo carece de base legal. “El presidente no tiene la autoridad constitucional ni legal para federalizar la Guardia Nacional aquí en Illinois. Sería, una vez más, una clara y flagrante violación de la Constitución y las leyes federales”, afirmó.