
Robert Francis Prevost, recién elegido como Papa León XIV, tiene por delante un pontificado cargado de expectativas, tanto internas como externas. Su perfil moderado, pastoral y cercano al pueblo latinoamericano le brinda una oportunidad única para sanar heridas, tender puentes y revitalizar una Iglesia global en transformación. A continuación, algunos de los retos que enfrentará:
1. Crisis de abusos sexuales y pérdida de credibilidad
A pesar de los esfuerzos impulsados por el Papa Francisco, los casos de abuso sexual por parte de clérigos continúan minando la confianza de millones de fieles. El nuevo Papa deberá reforzar los mecanismos de prevención, mejorar la transparencia institucional y garantizar justicia para las víctimas.
2. Reforma profunda de la Curia Romana
Aunque ya fue parcialmente reformada durante el pontificado anterior, la Curia sigue enfrentando resistencias y estructuras rígidas que obstaculizan una gestión más ágil. León XIV deberá consolidar esta reforma sin fracturar la unidad interna del Vaticano. (La Curia Romana es el conjunto de organismos administrativos, jurídicos y pastorales que asisten al Papa en el gobierno de toda la Iglesia.)
3. Unir a una Iglesia dividida
Mientras sectores progresistas promueven una mayor apertura pastoral —como permitir la comunión a divorciados vueltos a casar o reconocer a personas LGBT+—, otros sectores conservadores consideran esto una desviación de la doctrina tradicional. Prevost deberá encontrar un equilibrio que evite fracturas internas y fomente un diálogo sincero.
4. Vocaciones en caída
La escasez de sacerdotes y religiosos, especialmente en Europa y América del Norte, obligará al nuevo Papa a repensar las estructuras eclesiales. Tendrá que abrir el debate sobre el celibato, el rol de los laicos y la posibilidad de ordenar hombres casados o ampliar las funciones pastorales de las mujeres.
5. Conflictos globales
León XIV asume el liderazgo en un momento crítico, con guerras activas en Ucrania, Gaza y diversas regiones de África. Se espera que utilice su autoridad moral para impulsar caminos de paz y reconciliación, especialmente por su sensibilidad social y experiencia misionera.
6. Relación con China
Uno de los puntos diplomáticos más delicados es el acuerdo entre el Vaticano y el gobierno chino sobre el nombramiento de obispos. León XIV deberá evaluar si continuar con ese entendimiento o replantearlo para garantizar la libertad religiosa de los católicos en China.
7. Iglesia digital y evangelización moderna
En un mundo donde millones de personas viven conectadas a redes sociales pero alejadas de los templos, el nuevo Papa enfrentará el reto de acercar la fe a las nuevas generaciones utilizando los lenguajes, plataformas y formatos del siglo XXI.
8. Recuperar a los jóvenes
Muchas nuevas generaciones se han alejado de la Iglesia por considerarla moralmente rígida. León XIV deberá reencantar a estos jóvenes, mostrándoles una Iglesia que los escucha, los comprende y los acompaña sin prejuicios.
9. Justicia ambiental y liderazgo ecológico
Con el planeta en crisis, se espera que el nuevo Papa continúe y fortalezca el legado ecológico de Francisco. Ahora deberá actuar con mayor contundencia frente a gobiernos, industrias y ciudadanos en favor del cuidado de la “casa común”.
10. América Latina en disputa religiosa
El avance de iglesias evangélicas y el creciente secularismo en América Latina han provocado una notable pérdida de fieles. Por ello, León XIV deberá trabajar para reimpulsar una Iglesia más popular, cercana y comprometida con las comunidades.
Robert Francis Prevost llega al Trono de Pedro con una combinación poco común: origen norteamericano, vocación latinoamericana, formación académica sólida y experiencia pastoral en las calles. Su pontificado no solo deberá responder a los desafíos de la fe, sino también a las heridas de un mundo en transformación.