
Más de 100 migrantes fueron detenidos el jueves 29 de mayo durante un operativo federal en una obra de construcción en la capital de Florida. La mayoría de los arrestados son originarios de México y Colombia, según confirmaron fuentes locales.
El operativo fue ejecutado por agentes de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), con apoyo de la DEA, FBI y policías estatales. Se trató de una intervención directa contra empresas que presuntamente emplean a trabajadores sin autorización legal.
Los migrantes fueron sorprendidos mientras laboraban en una construcción de viviendas cerca de la Universidad Estatal de Florida. Algunos de ellos ya habían sido deportados con anterioridad o contaban con antecedentes migratorios. Otros simplemente no tenían papeles para trabajar.
El gobierno estatal informó que el operativo se realizó en el marco de la ley SB 2-C, impulsada por el gobernador Ron DeSantis, que obliga a las empresas a verificar el estatus migratorio de su personal. Tras el operativo, DeSantis declaró que las autoridades buscarán al subcontratista responsable por haberlos contratado.
Además de mexicanos y colombianos, también se reportaron detenidos de Guatemala, Nicaragua, El Salvador y Honduras. No se ha informado cuántos de los arrestados han sido ya trasladados a centros de detención migratoria.
Organizaciones civiles en Florida denunciaron la redada y cuestionaron su impacto social. La Florida Immigrant Coalition advirtió que estas acciones generan pánico en comunidades migrantes y provocan rupturas familiares.
“El mensaje es claro: trabajar sin papeles en este estado equivale a ser criminalizado”, dijo una vocera.
En medios locales se difundieron imágenes del momento del operativo. Los migrantes, en fila, fueron esposados frente a la maquinaria de obra. Algunos llevaban aún sus herramientas de trabajo. No se reportaron enfrentamientos ni incidentes durante la detención.
Se trata del operativo más grande de este tipo registrado en lo que va del año en Florida. Semanas antes, otras redadas similares ocurrieron en The Villages y Naples, con decenas de personas detenidas bajo condiciones similares.
El caso también ha puesto en tensión al sector de la construcción. De acuerdo con cifras del American Immigration Council, el 25.7% de los trabajadores en ese sector son migrantes, y en áreas como Miami, la proporción supera el 70%.
Al cierre de esta nota, el Departamento de Seguridad Nacional no había precisado cuántos de los detenidos serían deportados, ni si se presentarán cargos contra la empresa que los contrató.