
El sábado por la tarde, lo que comenzó como un encuentro deportivo entre equipos locales en Toluca, terminó en una escena de terror. Sujetos armados dispararon desde un vehículo en movimiento contra los asistentes de un partido de futbol llanero, hiriendo a uno de los jugadores.
La agresión ocurrió en las canchas ubicadas sobre el boulevard Solidaridad Las Torres, en la comunidad de Santa Ana Tlapaltitlán, al sur de la capital mexiquense. Eran alrededor de las 17:50 horas cuando, sin previo aviso, un automóvil se aproximó al campo y desde su interior comenzaron a escucharse detonaciones de arma de fuego.
Entre las gradas improvisadas, había familias enteras, mujeres, niños y vecinos de la zona que presenciaban el partido amistoso. De pronto, el ambiente se quebró.
“Fue de golpe, sin previo aviso. Solo escuchamos los disparos y todos corrimos como pudimos”, relató uno de los asistentes.
Algunos se lanzaron al suelo, otros corrieron buscando refugio entre los árboles, postes o vehículos estacionados. El pánico se apoderó del lugar.
Uno de los jugadores fue alcanzado por las balas. Cayó al suelo en plena cancha. El impacto fue grave, pero los paramédicos lograron estabilizarlo en el sitio antes de trasladarlo de urgencia a un hospital cercano. Hasta este domingo, su estado de salud se reporta como estable y permanece bajo observación médica.
A pesar de la rápida movilización de cuerpos de emergencia, no se ha detenido a ninguna persona por el ataque.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) confirmó que ya se abrió una carpeta de investigación para esclarecer los hechos. Como parte del proceso, se revisan grabaciones de cámaras de videovigilancia públicas y privadas ubicadas en la zona para intentar identificar el vehículo desde el que se realizaron los disparos.
Hasta ahora, se desconoce si el ataque fue directo contra alguno de los jugadores o si se trató de una agresión aleatoria. Las autoridades no descartan ninguna línea de investigación. Se analizan posibles conflictos previos entre equipos, rencillas personales o incluso la intervención de grupos delictivos.
Vecinos de Santa Ana Tlapaltitlán expresaron su indignación a través de redes sociales. Denunciaron que las canchas son frecuentadas por familias y jóvenes que acuden a practicar deporte, y que hechos como este ponen en riesgo a niños y adolescentes de la comunidad.
“Es un lugar donde vienen nuestros hijos, donde juegan niños cada fin de semana. No puede ser que esto pase a plena luz del día”, escribió una usuaria local.
La Dirección de Protección y Seguridad de Toluca también inició indagatorias paralelas y reforzó la vigilancia en zonas deportivas del municipio, ante la preocupación creciente entre los habitantes.
Mientras tanto, los entrenamientos y encuentros en esa zona permanecen suspendidos por decisión de los propios equipos locales. La cancha que fue escenario del ataque luce vacía. Las porterías están ahí, pero el partido quedó inconcluso.
Y hasta ahora, la pregunta sin respuesta es por qué alguien disparó contra un juego de futbol.