
El eco de una época se apaga… Robert Redford, actor, director y productor, murió a los 89 años en su casa de Utah… el hombre que fue el galán por excelencia de Hollywood y, al mismo tiempo, el padre del cine independiente moderno… se va dejando un vacío inmenso en la memoria de la pantalla grande…
Durante medio siglo su mirada azul fue un símbolo de lo aspiracional y lo humano… encarnó al héroe romántico, al rebelde político, al millonario roto… y al director sensible que supo retratar la intimidad de las familias en crisis. Su figura trascendió la industria… porque detrás del brillo del actor estaba el fundador de Sundance, un hombre que dio voz a cineastas emergentes cuando nadie los miraba…
De Santa Mónica al estrellato
Nació el 18 de agosto de 1936 en Santa Mónica, California… hijo de una familia trabajadora… desde niño conoció las carencias y la disciplina. El béisbol le abrió las puertas de la universidad, pero las fiestas lo cerraron pronto… Redford se marchó de viaje por Europa, en busca de algo distinto… encontró la pintura en Italia, el arte en España, la libertad en Francia…
De regreso en Nueva York quiso dedicarse a diseñar escenarios teatrales, pero la actuación lo encontró primero… En 1959 ya estaba en Broadway y poco después en la televisión estadounidense… En 1962 llegó al cine con Warhunt, pero sería Descalzos en el parque (1967), junto a Jane Fonda, la que lo catapultaría como un rostro irresistible para la cámara…
Rechazó papeles que no encajaban con su identidad, como el de El graduado, y apostó por Butch Cassidy and the Sundance Kid (1969)… ahí nació su nombre inmortal: Sundance. Esa película junto a Paul Newman lo convirtió en estrella de la noche a la mañana…
Ídolo, pero inconforme
El éxito lo persiguió durante los setenta… Todos los hombres del presidente (1976), El candidato, El gran Gatsby… películas que marcaron la política y la estética de la época. Redford tenía todo: fama, dinero, reconocimiento. Pero él nunca se sintió cómodo en esa piel de “chico de oro”…
“La gente ha estado tan ocupada relacionándose con mi aspecto que es un milagro que no me haya convertido en una masa de protoplasma acomplejado. No es fácil ser Robert Redford”, confesó alguna vez…
No era un hombre de alfombras rojas. A principios de los setenta compró un terreno en Utah, levantó su refugio y buscó la vida lejos de los flashes… ahí comenzó la semilla de algo mayor: el Instituto y el Festival Sundance.
Sundance: la revolución independiente
Lo que empezó como un taller para jóvenes cineastas en 1981… se transformó en el escaparate más influyente del cine independiente en el mundo. Gracias a Sundance, directores como Quentin Tarantino, Steven Soderbergh o Darren Aronofsky encontraron el espacio que los lanzó a la industria global…
Sundance no solo fue un festival: fue un manifiesto. Representó riesgo, innovación, libertad creativa. Redford lo sostenía como una extensión de sí mismo… una forma de equilibrar su estrellato con la necesidad de abrir caminos para otros.
El director y el productor
En 1980, con su primera película como director, Ordinary People, sorprendió al mundo. Ganó el Oscar a Mejor Director y también a Mejor Película… un debut arrollador que lo confirmó como un narrador delicado, íntimo, humano. Más tarde dirigiría A River Runs Through It (1992), Quiz Show (1994) y The Horse Whisperer (1998)… obras que consolidaron su estilo sobrio y contemplativo.
Como productor apostó por historias que incomodaban, que cuestionaban, que no eran complacientes. Su mirada estaba puesta en el cine como herramienta de cambio.
El hombre privado
La fama nunca lo devoró del todo. Estuvo casado más de 25 años con su primera esposa, Lola Van Wagenen, con quien tuvo cuatro hijos. En 2009 volvió a casarse con la pintora alemana Sibylle Szaggars. Su vida privada se mantuvo celosamente resguardada en su rancho de Utah…
“Algunas personas hacen terapia. Yo tengo Utah”, solía decir…
Además de cineasta, fue activista ambiental. Apoyó causas del Consejo para la Defensa de los Recursos Naturales y la Federación Nacional de Vida Salvaje. Siempre desde un perfil bajo, pero firme.
Premios y reconocimientos
Redford nunca ganó un Oscar como actor, aunque estuvo nominado en 1974 por El golpe. Sin embargo, acumuló reconocimientos:
- Oscar a Mejor Director en 1981 por Ordinary People.
- Oscar honorífico en 2002.
- Tres Globos de Oro, incluido el Cecil B. DeMille en 1994.
- La Medalla Presidencial de la Libertad en 2016, entregada por Barack Obama.
Además, su nombre quedó grabado tanto en Hollywood como en la política cultural de Estados Unidos.
Últimos años
Siguió activo hasta bien entrados los ochenta. En 2017 protagonizó Our Souls at Night, junto a Jane Fonda, en un homenaje tardío a la pareja que conquistó a generaciones. En entrevistas dijo que esa sería una de sus últimas películas como actor… quería volver a la pintura, su primer amor.
El martes 16 de septiembre de 2025, Robert Redford murió en su casa de Utah, mientras dormía. Tenía 89 años. Según sus allegados, no padecía enfermedades graves conocidas. La noticia fue confirmada por su representante.
Legado inmenso
Robert Redford fue muchas cosas… un ídolo de generaciones, un actor que encarnó al héroe clásico, un director sensible, un productor visionario, un activista discreto y un hombre que eligió siempre la privacidad sobre el ruido. Hoy su muerte cierra un capítulo irrepetible en la historia del cine.