El exjugador de la NFL y actual comentarista de ESPN, Jason Kelce, se vio envuelto en un altercado el pasado sábado durante su visita a la Universidad Estatal de Pensilvania (Penn State). Videos que rápidamente se viralizaron en redes sociales muestran a Kelce arremetiendo contra un fan después de que este hiciera comentarios homofóbicos dirigidos a su hermano, Travis Kelce, en relación con su relación con la cantante Taylor Swift.
El incidente ocurrió en el marco de la visita de Jason Kelce al campus de University Park para participar en el programa “College GameDay” de ESPN, en el que también tomó parte en un desafío de pateo organizado por Pat McAfee. Durante el evento, un estudiante que seguía a Kelce lo provocó gritando: “Kelce, ¿cómo se siente que tu hermano sea un "gay" por salir con Taylor Swift?”. Jason, quien al parecer escuchó el insulto, reaccionó dándose la vuelta, arrebatándole el teléfono al fan y arrojándolo con fuerza al suelo.
En otro video que se publicó posteriormente, se observa a Kelce enfrentándose al provocador, diciendo repetidamente: “¿Quién es el "gay" ahora?”, mientras el fan exigía que le devolviera su teléfono. El intercambio culminó con Kelce recogiendo el dispositivo y alejándose del lugar mientras la multitud a su alrededor observaba sorprendida.
WILD SCENE AT PENN STATE
— OutKick (@Outkick) November 2, 2024
Heckler: “Kelce how does it feel that your brother is a f****t for dating Taylor Swift?”
Jason Kelce slams the kid’s phone on the ground.
Jason Kelce: “Who’s the f****t now?” pic.twitter.com/9Dy1VSRwHI
Las imágenes del altercado causaron revuelo en redes sociales y dividieron opiniones entre los usuarios. Algunos defendieron la reacción de Kelce, alegando que las provocaciones y comentarios ofensivos hacia su hermano justificaban su respuesta. “Jason hizo lo correcto al defender a su familia. Nadie debería tolerar ese tipo de lenguaje”, comentó un usuario en X (anteriormente Twitter). Sin embargo, otros criticaron al exjugador por reaccionar de forma violenta, argumentando que como figura pública debía manejar la situación de manera más profesional.
Campus police de la Universidad Estatal de Pensilvania indicaron a medios como Page Six que no se había presentado ningún informe formal sobre el incidente y que no disponían de más información al respecto. Por su parte, ni Jason ni su hermano Travis Kelce, quien actualmente juega como ala cerrada de los Kansas City Chiefs, han hecho comentarios públicos al respecto. Taylor Swift, quien ha asistido a varios juegos de la NFL y ha sido vista apoyando a Travis en múltiples ocasiones, tampoco ha emitido una declaración.
Este evento se suma a la atención mediática que ha rodeado a los hermanos Kelce desde que Travis revelara en su podcast New Heights en 2023 que intentó darle a Swift una pulsera de la amistad con su número de teléfono en uno de sus conciertos. Desde entonces, la relación entre el jugador y la cantante ha captado la atención tanto de los medios de entretenimiento como de los fanáticos de la NFL, generando debates y un aumento en la popularidad del deporte entre seguidores de Swift.
La presencia de la artista en los estadios ha generado un impacto notorio en la percepción del fútbol americano. De acuerdo con una encuesta realizada por The Athletic, un 72.5% de los jugadores de la NFL ve de forma positiva la influencia de Swift en el deporte, mientras que un 22.5% la considera neutral y solo un 4.9% la ve de forma negativa.
Jason Kelce, quien ha demostrado ser un firme defensor de la relación de su hermano con Swift, expresó en junio durante un evento de la Fundación de Autismo de los Eagles que toda su familia estaba apoyando a Travis y su relación. Además, se le vio asistiendo a uno de los conciertos del Eras Tour de la cantante en Londres en ese mismo mes y recientemente en Miami en octubre.
Aunque el incidente en Penn State ha puesto a Kelce en el centro de la polémica, muchos de sus seguidores destacan su carácter protector y su disposición para defender a los suyos. Sin embargo, este episodio también resalta la presión constante y los desafíos que enfrentan las figuras públicas cuando se ven confrontadas por provocaciones y críticas en situaciones inesperadas.
El desarrollo de esta historia sigue en curso, y tanto los fanáticos como la prensa esperan una posible respuesta por parte de los implicados y de las autoridades universitarias sobre las consecuencias, si las hubiera, de este enfrentamiento.