Ariel Henry fue nombrado primer ministro dos días antes del asesinato del presidente de Haití, sin embargo, su cargo no se oficializó, por lo que este fin de semana recibió el respaldo de Naciones Unidas y diferentes mandatarios alrededor del mundo.
“Todos los que me conocen saben que no estoy interesado en esta batalla, ni en ningún tipo de toma de poder”, declaró Claude Joseph a un medio internacional.
El primer ministro interino reiteró su amistad con el presidente de Haití y aseguró que su único interés en el gobierno es que se haga justicia por este crimen.
Joseph añadió que entregar el cargo a Henry es por “el bien de la nación”.
