
Major, de tres años, fue adoptado en 2018 por los Biden, convirtiéndose en el primer perro rescatado en llegar a vivir a la Casa Blanca, sin embargo, debido a la energía que tiene, puesto que es un perro joven, saltaba, ladraba y en ocasiones llegó a mostrarse agresivo con el personal de seguridad, e incluso, logró soltar una mordida.
A comparación de Major, Champ de 13 años, se ha comportado más dócil puesto que ya tiene una edad avanzada.
Los perros llegaron a la Casa Blanca cuatro días después de que Joe Biden ganara la presidencia, sin embargo, tras su regreso a Delaware, no se sabe si estos permanecerán ahí o si en algún momento regresarán a Washington.
Major se une a la lista de perros que han sido adoptados por líderes mundiales entre los que se encuentran Kenzie, perro del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; y Nemo, perro adoptado por el presidente francés Emmanuel Macron.
Durante el mandato de Donald Trump no hubo mascotas en la Casa Blanca, de acuerdo con ‘Infobae’, este fue el periodo más largo en el que no hubieron mascotas presidenciales en más de cien años, convirtiéndose en el primer presidente estadounidense sin una mascota en más de un siglo.