
Para un jefe de Estado extranjero no hay mayor condecoración en México que recibir la orden del Águila Azteca. El sábado, de manos de López Obrador, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, la recibió, la más alta distinción de nuestro país la porta un hombre que encabeza un régimen que viola derechos humanos, que encarcela a manifestantes y que prohíbe libertades políticas y civiles a sus ciudadanos. Y en la dictadura cubana hay clara evidencia de que durante y después de las protestas del 11 de julio de 2021, el gobierno cometió violaciones a los derechos humanos, incluyendo detenciones arbitrarias, procesos penales abusivos y actos de tortura. La organización Human Rights Watch pudo constatar que en los tribunales cubanos se han ratificado sentencias en contra de más de 380 manifestantes, algunos con penas de más de 25 años bajo el cargo de sedición. PARA AMLO LAS VÍCTIMAS DE LA DICTADURA NO IMPORTAN | EDITORIAL DE ADELA MICHA.