La renuncia del gobernador de Nuevo León para competir por la presidencia de México en 2024 mantiene en vilo a ese estado del norte del país, donde residen algunas de las principales industrias, debido a una pugna política con la oposición sobre quién debe reemplazarlo. El gobierno local, controlado por el Movimiento Ciudadano que postula a Samuel García para la presidencia, rechazó el jueves el nombre que eligió el Congreso local, de mayoría del Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI), tras una caótica sesión la noche anterior que fue irrumpida a la fuerza por manifestantes y de la que ambos sectores se culparon mutuamente.