Con una inversión histórica de 2 mil millones de pesos, en Michoacán se ha logrado la construcción, rehabilitación y/o equipamiento de 2 mil 500 planteles educativos, en beneficio de 570 mil estudiantes, como parte de las acciones emprendidas en la cruzada para eliminar las aulas "de palitos”.
Desde 2015, Silvano Aureoles Conejo, gobernador de esa entidad, tuvo claro que había cientos de aulas construidas con lonas de plástico, tablas y unos cuantos pizarrones y butacas viejos, por lo que se propuso convertirlos en espacios aptos, seguros y dignos para el proceso de enseñanza-aprendizaje.
“Más allá de resolver la problemática administrativa en el sistema educativo, lograr una educación de calidad conlleva, además, el compromiso y entrega de los maestros, la participación de los padres de familia y una infraestructura digna donde tanto estudiantes como docentes puedan potencializar sus capacidades al máximo”, señaló el mandatario michocano.
En 2015, la Secretaría de Educación de Michoacán identificó que al menos el 90 por ciento de los planteles escolares, contaba con alguna deficiencia en su infraestructura, de las cuales un total de 271 aulas y espacios educativos eran “de palitos”, por ello, priorizó la inversión de recursos en la construcción de aulas, servicios sanitarios, bodegas, direcciones, patios cívicos y/o canchas deportivas, en estas escuelas con mayor necesidad.
"Mi convicción es que podamos levantar bandera blanca en la infraestructura educativa, donde dejen de existir esas aulas de plástico y madera, y la niñez y juventud reciba su educación en lugares desde donde se fomente la seguridad, tranquilidad y la sana convivencia social”, aseveró Silvano Aureoles.