El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue recibido con una mezcla de abucheos y algunos aplausos este domingo durante el partido entre los Washington Commanders y los Detroit Lions de la NFL, celebrado en el Northwest Stadium, a las afueras de la capital estadounidense.
Trump arribó al recinto apenas dos minutos antes del medio tiempo, cuando el marcador se encontraba 10-22 a favor de los Lions. El mandatario asistió al encuentro como invitado del empresario Josh Harris, propietario de los Commanders.
Su aparición en las pantallas del estadio, acompañado por el presidente del Congreso, Mike Johnson, provocó una fuerte reacción entre los asistentes, con predominio de abucheos sobre los aplausos.
Minutos antes, el Air Force One, avión presidencial que transportaba a Trump desde Florida, había sobrevolado a baja altura el estadio, lo que también desató una ola de rechiflas entre los aficionados.
Durante el descanso, el mandatario participó en una breve ceremonia militar, donde nuevamente fue recibido con abucheos.
La presencia del presidente coincide con un reporte de ESPN, que reveló el interés de Trump en que el nuevo estadio que los Commanders construyen en Washington lleve su nombre.
En su segundo mandato, Trump ha destacado por su constante asistencia a eventos deportivos, una práctica poco común entre los presidentes de Estados Unidos, y que ha generado tanto simpatías como controversias en distintos sectores del país.