
Un avión de pasajeros se estrelló este jueves en la región de Amur, en el Extremo Oriente ruso, dejando un saldo fatal de al menos 48 personas muertas, según confirmaron autoridades locales. No se reportaron sobrevivientes.
La aeronave siniestrada es un Antonov An-24, un avión bimotor turbohélice diseñado para vuelos de corta distancia. Según los primeros informes, el aparato cubría la ruta entre las ciudades de Blagoveshchensk y Tinda cuando perdió contacto con los controladores aéreos y posteriormente se estrelló en una zona remota de la región.
El gobernador de Amur, Vasili Orlov, confirmó que 48 personas fallecieron en el accidente, aunque inicialmente había informado que viajaban 49 a bordo. La cifra exacta de ocupantes sigue siendo motivo de discrepancia. La agencia de noticias rusa TASS reportó que el avión transportaba 46 personas, incluidos dos menores de edad y seis tripulantes.
Las causas del accidente aún no han sido determinadas. Equipos de emergencia se desplazaron al lugar del siniestro para iniciar labores de recuperación e investigación. Las condiciones meteorológicas en la zona y posibles fallas mecánicas están siendo consideradas por las autoridades aeronáuticas.