
Fue hace poco más de 20 años, cuando Miguel Ángel García Hernández, salió de San Luis Potosí rumbo a Estados Unidos para encontrar a su madre que fue en busca de una mejor vida. Apenas tenía 12 años de edad.
Desde entonces Miguel Ángel vivió en territorio norteamericano junto con su madre. Posteriormente se dedicó a pintar casas, tuvo a su familia, era padre de 4 menores y su esposa estaba esperando a otro bebé que ya venía en camino. Pero todo cambió en 2025, con las fuertes políticas migratorias de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, María Hilaria García, madre de Miguel Ángel fue deportada a México en julio pasado.
En Estados Unidos comenzaron las redadas, las detenciones y las deportaciones. Muchas veces, se ha denunciado que las capturas son indiscriminadas, pues con solo la apariencia, los agentes de Migración y Control de Aduanas, el ICE, detenían a las personas.
Y finalmente la realidad alcanzó a Miguel Ángel García Hernández, quien fue detenido por agentes del ICE en Dallas, Texas, el 24 de septiembre. Ese día, Joshua Jahn, un joven de 29 años, decidió subir a un techo de unos de los edificios cercanos a las instalaciones de migración y abrió fuego, causando la muerte de dos detenidos y heridas graves a otro más. Y sí, las balas alcanzaron a Miguel Ángel.
A la distancia, la señora María Hilaria no daba crédito de lo sucedido. Tras el ataque las autoridades dijeron que el asesino, Joshua Jahn, disparó indiscriminadamente desde un tejado cercano. Dijeron que odiaba al gobierno de los Estados Unidos y quería incitar al terror matando a agentes federales, pero ningún personal de ICE resultó herido en el tiroteo, y Jahn se suicidó después del asalto.
El ataque ocurrió en momentos en que las detenciones masivas de inmigrantes han generado rencor hacia los agentes de ICE y han sembrado miedo en las comunidades inmigrantes de todo el país.
La investigación preliminar sobre lo sucedido apunta que el sospechoso abrió fuego poco antes de las 6:40 (hora local) desde un edificio adyacente. Hubo 3 víctimas: el salvadoreño Norlan Guzman Fuentes, de 37 años, quien falleció al instante; Miguel Ángel que fue hospitalizado y uno más que se desconoce su identidad.
Tras una lucha entre la vida y la muerte, en un comunicado compartido por la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos, la familia confirmó que Miguel Ángel García-Hernández, de 32 años, sucumbió a sus heridas después de ser retirado del soporte vital.