Ayer ese país vivió horas convulsas al ver en televisión la forma en la que criminales tomaron un canal, hicieron de periodistas sus rehenes y desataron una histeria colectiva entre explosivos y sangre que, plasmados en video, se hicieron virales… Pero en medio de todo esto hay un factor clave, la crisis de violencia en Ecuador lleva el sello de los cárteles mexicanos… Ecuador es gobernado por Daniel Noboa, un hombre de 36 años que saltó del empresariado a la política con la promesa de poner mano dura contra los grupos de la delincuencia organizada… Con menos de dos meses en el cargo, comenzó a tejer los hilos de lo que había prometido… Inició con un plan de limpieza profunda en las cárceles… Buscaba extraditar reos, quitarles los lujos que tenían en sus celdas y evitar la convivencia de miembros de las principales organizaciones criminales de Ecuador, o sea Los Choneros y Los Lobos… Pero el 7 de enero, José Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”, el criminal más peligroso del país y líder de Los Choneros, se fugó de una cárcel de Guayaquil… Las autoridades tardaron 15 horas en darse cuenta de lo ocurrido… A la fuga del “Fito” le siguió una estela de atentados y motines en las cárceles del país… Pero 48 horas después vino una segunda fuga… La madrugada de ayer del penal de Riobamba escapó Fabricio Colón Pico, líder de Los Lobos… El hombre llevaba apenas tres días preso, pues fue acusado por la Fiscal General de Ecuador, Diana Salazar, de tener un plan para asesinarla… Sin embargo, desde el lunes, el gobierno ecuatoriano había ordenado un estado de excepción de 60 días para responder a la ola de violencia con policías secuestrados, fugas de presos y ataques con explosivos… Claramente eso no frenó al crimen organizado… Ayer por la tarde, los delincuentes tomaron por 30 minutos el canal 10 de TC Televisión en Guayaquil, mostrando sus armas a las cámaras… Luego llegó la policía, liberaron a los rehenes y detuvieron a 13 personas… Pero en paralelo fueron asesinados custodios de penales, delincuentes entraron a la Universidad de Guayaquil y se reportaron robos en comercios… Todo esto detonó la suspensión de clases en el país y que el presidente Noboa firmara un decreto en el que declara un conflicto armado interno… Es decir, se reconoce que estos delincuentes tienen capacidad de tomar el control de territorios de forma prolongada y sostenida, por lo que son una amenaza no solo para la seguridad, sino para la existencia del Estado… Decir que existe un conflicto armado interno implica que las Fuerzas Armadas desplegarán todo su poder en contra de los grupos criminales, que ahora son considerados terroristas…