El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizó una peculiar aparición como parte de su campaña presidencial para las elecciones de 2024. Este domingo, 20 de octubre, Trump se presentó en un restaurante de McDonald's en Pensilvania, vistiendo un delantal de la cadena de comida rápida y desempeñando varias funciones dentro del establecimiento, desde freír papas hasta despachar pedidos en el mostrador y la ventanilla de AutoMc. Este evento fue parte de su estrategia para generar simpatía entre los votantes de clase trabajadora, destacando su capacidad de conectar con el público a través de gestos inusuales y populistas.
Trump llegó a la sucursal de McDonald's, se puso un delantal del restaurante y se dispuso a preparar las papas fritas. Con una dosis de su característico humor, comentó sobre el proceso de freírlas y cómo les puso "mucha sal" antes de vaciarlas en las típicas bolsas rojas. Tras terminar la preparación, se dirigió al mostrador, donde una familia esperaba su pedido, y entregó las papas diciendo con orgullo: "Regalo de Trump".
Además de su interacción en el restaurante, el expresidente hizo varios comentarios irónicos sobre su rival demócrata, **Kamala Harris**, insinuando que su experiencia laboral en McDonald's, mencionada por ella en su juventud, no era genuina. Trump dijo con tono sarcástico: "He trabajado 15 minutos más que Kamala, que jamás ha trabajado aquí", en referencia a los comentarios de Harris sobre haber trabajado en un McDonald's en Alameda, California.
Esta aparición de Trump en McDonald's es vista como una maniobra publicitaria diseñada para desacreditar a Kamala Harris, quien ha relatado su experiencia laboral juvenil en el restaurante como parte de su biografía política. Trump, siempre dispuesto a desafiar a sus oponentes, aprovechó la ocasión para criticar a Harris, sin aportar pruebas, insinuando que su relato sobre haber trabajado en McDonald's no era cierto. El expresidente, conocido por su estilo polémico, usó esta oportunidad para conectar con los votantes que trabajan en sectores similares, enviando un mensaje de cercanía.
Además, Trump aprovechó el momento para interactuar directamente con los clientes. Durante su tiempo en la ventanilla de AutoMc, no solo tomó pedidos y saludó a los clientes, sino que también regaló hamburguesas sin cobrar. A muchos de los clientes que acudieron al establecimiento, Trump les decía que no debían preocuparse por pagar. Este tipo de gestos, que pueden parecer teatrales, forman parte de la narrativa populista que el expresidente ha intentado mantener desde su primera campaña en 2016.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 20, 2024
Mientras tanto, la vicepresidenta **Kamala Harris** celebraba su cumpleaños número 60 en un contexto muy diferente. Harris pasó el día en iglesias afroamericanas en **Georgia**, donde criticó duramente las tácticas de Trump y su creciente retórica despectiva y hostil. En su respuesta, Harris comentó que “los estadounidenses merecen algo mucho mejor”, en referencia a las tácticas de burla y menosprecio utilizadas por Trump.
Harris también aprovechó para destacar las diferencias entre las dos visiones de país. Señaló que su enfoque es el de ayudar a las familias a salir de la pobreza, centrándose en políticas que beneficien a los ciudadanos de a pie. Además, criticó abiertamente a Trump por "evitar debates y cancelar entrevistas por agotamiento", insinuando que la edad avanzada del expresidente, quien tiene 78 años, podría estar afectando su capacidad mental para asumir la presidencia nuevamente.
El enfrentamiento entre Trump y Harris ha sido un tema recurrente en esta campaña. Harris ha sido una figura clave del partido demócrata, y Trump ha enfocado parte de su campaña en desacreditarla. Si bien la aparición de Trump en McDonald's fue vista por algunos como un intento de acercarse al votante común, para otros fue solo una táctica populista más para llamar la atención de los medios y desviar la atención de las cuestiones importantes.
Este evento de campaña es un reflejo de cómo Trump busca reposicionarse como un candidato fuera de lo convencional, utilizando cualquier oportunidad para conectar con el electorado a través de gestos poco ortodoxos. Al mismo tiempo, las críticas hacia su edad y capacidad para asumir la presidencia son temas que se seguirán debatiendo a lo largo de la contienda.
En definitiva, el "turno de trabajo" de Donald Trump en McDonald's se enmarca dentro de su estrategia de conectar con los votantes, mientras que sus ataques a Kamala Harris continúan marcando el tono de su campaña, con la intención de debilitar la imagen de su principal rival demócrata.