Pero esos alimentos no solo son los peores enemigos si quiere mantener los niveles de colesterol estables, ya que hay otros que comemos a diarios y sin darnos cuenta si llegan a perjudicar, aumentan el LDL (colesterol malo) y baja el HDL (colesterol bueno), como los alimentos ricos en grasas, pero no todos.
Las grasas saturadas tienen un principal problema que surge del daño que pueden infringir en las paredes del corazón y de las arterias, depositándose en forma de placas (de ateroma) y así dar una subida de LDL (colesterol malo).
El doctor Manuel Angoso, responsable de la Unidad de Chequeos del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, indicó que las grasas saturadas, como las de origen animal la de carnes rojas, están asociadas con un incremento de colesterol malo.
"Las grasas saturadas, como la grasa de palma, pero también todas las de origen animal como la mantequilla o la presente en las carnes rojas, están asociadas con un incremento de colesterol malo, y con un posible aumento del riesgo de sufrir un infarto o un ictus", señaló.
"El HDL ejerce una labor de limpieza de las arterias fundamental para preservar su salud; el ejercicio físico, dejar de fumar y perder peso han demostrado subir los niveles de HDL", agregó el doctor.
Se debe tener cuidado con los alimentos ricos en grasas trans, ya que son grasas no saturadas modificadas industrialmente, tienen un efecto doble sobre el colesterol. "El primer efecto de los ácidos grasos trans es aumentar los niveles de colesterol total, sobre todo del colesterol LDL (colesterol malo), mientras que disminuye el colesterol HDL (colesterol bueno)".
La Organización Mundial de la Salud (OMS), indicó que un consumo mayor de 1 gramo al día de grasa trans produce aumento de la rigidez de la arteria carótida. Por los que las grasas trans es conveniente evitar.
Las grasas trans están presentes en muchos alimentos procesados y que consumimos sin darnos cuenta que podemos estar comiendo a diario aumentando el colesterol malo. Alimentos horneados como: galletas, bollería industrial, alimentos precocinados, snacks; los fritos como patatas fritas, maíz, y otros aperitivos, junto con los helados, cremas y batidos son los alimentos que contienen grasas trans en mayor cantidad, por lo que debemos de evitarlos.
Para reconocer este tipo de alimentos y reducirlos al máximo es importantes revisar en las ertiquetas de los productos, y estas grasas las reconocerás como “grasas hidrogenadas” o “parcialmente hidrogenadas”. Así que ya lo sabes y trata de evitar a toda costa este tipo de grasas para cuidar tu salud.