Ciudad de México– A pesar de las quejas y protestas de residentes de la colonia Tabacalera alcaldía Cuauhtémoc, este jueves fue instalada la tradicional feria navideña en la explanada del Monumento a la Revolución, un clásico de la temporada que cada año atrae a miles de visitantes pero también genera controversia entre quienes habitan en los alrededores.
El Gobierno de la Ciudad de México autorizó la colocación de los juegos mecánicos, puestos de comida y atracciones ligadas a la llamada Romería Navideña, que se espera opere hasta los primeros días de enero. Los organizadores sostienen que el evento ofrece diversión familiar, espacios de esparcimiento y oportunidades económicas para artesanos y comerciantes que dependen de la temporada para sus ingresos.
Sin embargo, un sector importante de la comunidad vecinal se ha manifestado públicamente en contra de la permanencia de la feria. En consultas y sondeos promovidos por autoridades capitalinas, la mayoría de los participantes expresó su rechazo por los efectos negativos que consideran que la instalación causa en su calidad de vida. Según datos de la consulta, 344 de los 533 vecinos encuestados manifestaron estar en desacuerdo con la feria, mientras que sólo 187 se mostraron a favor.
Los habitantes de la Tabacalera han señalado que el ruido generado por la música, los altavoces y los juegos mecánicos afecta al descanso nocturno especialmente porque algunas actividades prolongan su funcionamiento hasta altas horas de la madrugada. Además, acusan que el flujo de asistentes incrementa el caos vial y provoca problemas de basura y aglomeración en zonas habitadas.
Varias voces vecinales también han solicitado transparencia en el proceso de permisos y que se reabra el canal de diálogo con las autoridades para explorar alternativas, como reubicar la feria en espacios públicos más adecuados o limitar sus horarios y alcance, con el fin de equilibrar la tradición con el bienestar de quienes viven en las inmediaciones del monumento histórico.
Por su parte, el Gobierno local ha mantenido que la feria forma parte de las festividades decembrinas de la capital y que se implementarán medidas de supervisión para reducir impactos negativos. En días anteriores, representantes de la administración realizaron sondeos y encuentros con comerciantes y colonos, aunque hasta el cierre de esta edición no se había anunciado un resultado formal que condicionara la permanencia del espectáculo.
Mientras tanto los juegos y atracciones ya recibieron luz verde y comenzaron a operar con la expectativa de recibir a miles de familias durante las próximas semanas, en medio de opiniones encontradas sobre la conveniencia de instalar ferias en espacios emblemáticos de la ciudad.