
Entre morenistas se ponen de moda, o comprarse casas de lujo o viajar al extranjero en las mejores aerolíneas y hospedarse en los mejores hoteles, ahora se puso de moda entre ellos, viajar en aviones privados.
Ya les contamos el viaje del senador de Morena, Gerardo Fernández Noroña. Este fin de semana: en Coahuila el senador de Noroña rentó un avión Jet privado para un viaje de trabajo en Piedras Negras y Ciudad Acuña.
“¿Era necesario?”, le preguntó la prensa al ex presidente de la mesa directiva de la Cámara de Senadores, “sí claro que era necesario”, respondió Noroña.
Ahora se le suma otro morenista, ahora el Gobernador de Morena en el estado de Puebla, Alejandro Armenta, quien fue exhibido en fotos en el aeropuerto de Teterboro, Nueva Jersey, tomando junto a su esposa e hija un vuelo privado en un Learjet 60 matrícula XA-IBC.
Este avión privado le pertenece a la empresa Aero JL y se renta en tres mil 700 dólares por hora. Hasta el momento se desconoce el tiempo total que se estuvo utilizando este lujoso avión.
De acuerdo con la página Flight Aware, en la que se monitorean vuelos de aeronaves en tiempo real, el vuelo privado de Nueva Jersey a Puebla tomó cinco horas, lo que representa un costo total de 18 mil 500 dólares.
Que en moneda mexicana serían aproximadamente, 347 mil 615 pesos, según la tarifa publicada en la página de la empresa Aero JL, y que es dueña del avión.
Lo que se sí se hizo público fue que desde el martes el Gobernador de Puebla había informado su estancia en Arizona en los Estados Unidos, la oficina de Comunicación del gobierno de Puebla confirmó la noche de este miércoles este viaje a Nueva Jersey para “acompañar a un integrante de su familia que fue hospitalizado”.
La foto del mandatario poblano en el aeropuerto de Nueva Jersey circuló en distintas cuentas de redes sociales y esta información coincidió con el vuelo de Learjet que partió a las 7:49 de la noche (hora local) y aterrizó en Puebla a las 10:25 de la noche, en un recorrido de tres mil 500 kilómetros.
De acuerdo con las mismas autoridades de Puebla, este viaje no se pagó con dinero público y que respondió de igual manera a una emergencia familiar.