La actriz Kate del Castillo tomó con humor las recientes declaraciones de su padre, el actor Eric del Castillo, quien aseguró que “le metería una golpiza” a Sean Penn si llegara a encontrárselo, al recordar la polémica que rodeó a su hija tras su encuentro con Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Durante un evento organizado por el entrenador canino César Millán, la protagonista de La Reina del Sur fue cuestionada sobre las palabras de su padre y respondió entre risas:
“Me encanta. Mi papá, obvio, pues es mi papá. Mal haría si no dijera eso. Imagínate”.
Kate del Castillo
Con esa frase, Kate restó dramatismo al asunto y reconoció que comprende el impulso protector de su padre, aunque evitó profundizar en su relación con Penn, con quien mantiene diferencias desde 2016, cuando ambos participaron en el encuentro con el capo sinaloense.
Aquel episodio marcó un distanciamiento entre ambos actores, luego de que Del Castillo acusara a Penn de haberla traicionado y de poner en riesgo su seguridad.
Más allá de la controversia, Kate se mostró accesible y de buen humor durante el evento, donde habló de su amor por los animales y de su amistad con Millán, a quien definió como “una gran inspiración”. También aprovechó para mencionar a su familia y a sus amigas de toda la vida.
“La que se fue fui yo, y luego la que las extraña soy yo. Pero son amistades que duran para toda la vida”, dijo con emoción.
La actriz también envió un mensaje de apoyo a su amiga Yolanda Andrade, quien continúa en proceso de recuperación.
“Estamos siempre rezando por ella, que se ponga mejor. Ella es una guerrera, una mujer fuerte, de mucho corazón, así que va a salir adelante”, aseguró.
Finalmente, Del Castillo negó que su pareja, el director de fotografía Edgar Bahena, le haya regalado un muñeco en forma de bebé, rumor que circuló en redes sociales.
“No me lo dio él. Nadie entendió nada, han hecho todo un rollo. Me da mucha flojera. Lean bien las cosas, porque no vale la pena”, sentenció.
Con humor, firmeza y cariño, Kate del Castillo volvió a demostrar que sabe manejar la polémica con elegancia… y con una sonrisa.