Antes de columinar el domingo: el Autódromo Hermanos Rodríguez dejó de ser un festival como cualquier otro y se convirtió en una máquina del tiempo para todos quienes aman el rock “viejito” y nos referimos nada más y nada menos que a la legendaria banda Linkin Park.
De pronto el evento se detuvo, por un momento se pensó que fue una falla técnica pero realmente la magia estaba pasando. En ese momento en la pantalla principal apareció una cuenta regresiva y las miradas de los asistentes estaban por reencontrarse con una etapa de su vida, la adolescente.
No cabe duda que el legado de Chester Bennington no es solo un recuerdo que permanece en el aire: sino que se trata de un legado que para mucho fue parte de su crecimiento. Por lo que reconectar con nuestro misma personalidad del ayer, fue mágico para muchos.
Cuando esa cuenta regresiva en el escenario llegó a cero: Linkin Park salió a escena para demostrar que, a pesar de los cambios inevitables, el eco de los 2000 sigue siendo una fuerza colectiva.
Cuando empezaron a sonar las primeras notas de canciones como “Somewhere I Belong” y un “Let’s go!”, mismas que rebotaron por todo el recinto, obligó a muchos a correr desde el escenario de Deftones hasta el principal.
“Muchas gracias”, soltó Mike Shinoda al inicio, mientras una marea de cuerpos brincaba, cabeceaba o simplemente observaba con atención el comienzo de esta nueva etapa del grupo.
¿Quién es la nueva vocalista Linkin Park?
Emily Armstrong, la nueva vocalista fue la que dividió a la comunidad desde el anuncio de su llegada en 2024, ella apenas y le bastaron unas notas para dejar claro que no venía a imitar a nadie.
Sus guturales en “Lying From You” provocaron emociones encontradas: desde gritos de aprobación hasta miradas de nostalgia incómoda. Pero cuando Shinoda dijo un “That’s beautiful”, el público eligió seguir adelante con ellos.