La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció la implementación de un nuevo impuesto que afecta a plataformas digitales como Shein, Temu, Uber, DiDi, y Airbnb, con el objetivo de regular sus operaciones en el mercado mexicano. Esta medida, que entró en vigor el 1 de enero, busca fortalecer la industria local y asegurar que las empresas extranjeras cumplan con las disposiciones fiscales del país.
Durante la conferencia matutina "La Mañanera del Pueblo" del 3 de enero, Sheinbaum explicó que este gravamen se dirige a empresas que realizan transacciones a través de internet y que, según su análisis, operan de forma masiva bajo el esquema de comercio digital.
"Una cosa es la llegada individual de una pieza, pero lo que detectamos es que se estaban utilizando estas plataformas para traer varios productos y después venderlos en México, lo cual requiere pagar impuestos", señaló la mandataria.
Sheinbaum destacó que la medida tiene un doble propósito: regular la reventa masiva de productos importados y fortalecer a la industria textil nacional. “La industria textil en nuestro país se desarrolló a partir de empresas familiares. Muchas cerraron debido a la entrada de productos que inundaron el mercado sin contribuir a la economía mexicana”, subrayó.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) las disposiciones generales para el comercio exterior, incluyendo un impuesto del 19% sobre productos importados de países con los que México no tiene tratados de libre comercio.
Además, las plataformas digitales deberán cumplir con nuevos requisitos fiscales, entre ellos:
Empresas como Shein y Temu, conocidas por ofrecer productos a precios competitivos y envío directo desde el extranjero, se ven directamente afectadas. Estas plataformas deberán ajustar sus operaciones para cumplir con las nuevas reglas, lo que podría incrementar los precios de sus productos en México.
Sheinbaum afirmó que esta regulación es fundamental para proteger a la industria textil local, especialmente en regiones como El Bajío, donde muchas pequeñas y medianas empresas textiles han enfrentado dificultades debido a la competencia desleal de productos importados sin impuestos.
El impacto del nuevo marco fiscal no se limita al comercio de productos. Plataformas que ofrecen servicios de transporte, hospedaje y uso temporal de bienes, como Uber, DiDi y Airbnb, también deberán cumplir con estas normativas.
Entre las obligaciones, destacan:
Si bien la medida ha sido presentada como un esfuerzo por equilibrar la competencia y fortalecer la economía local, no ha estado exenta de críticas. Algunos expertos señalan que este impuesto podría encarecer productos y servicios en plataformas digitales, afectando tanto a los consumidores como a las pequeñas empresas que dependen de estos canales para operar.
Por otro lado, las autoridades han defendido la medida como una forma de modernizar la regulación fiscal en el comercio digital y garantizar que todas las empresas, nacionales e internacionales, contribuyan al desarrollo del país.
El impuesto implementado por el gobierno de Claudia Sheinbaum representa un avance hacia la regulación del creciente mercado digital en México. Aunque genera desafíos para plataformas extranjeras, también abre una oportunidad para fortalecer la economía local, especialmente en sectores clave como el textil.
El éxito de esta política dependerá de su implementación efectiva y del equilibrio entre la recaudación fiscal y el impacto en los consumidores y pequeñas empresas. A medida que avance el año, será crucial observar cómo las plataformas digitales y los usuarios se adaptan a este nuevo panorama regulatorio.
La presidenta @Claudiashein impulsa una reforma a la Ley Federal del Trabajo que formaliza la actividad de las y los trabajadores de plataformas digitales con derechos laborales, seguridad social y reglas claras, manteniendo la flexibilidad del modelo de negocio. pic.twitter.com/uDhG9czXww
— Gobierno de México (@GobiernoMX) December 13, 2024