A pesar que la pandemia de Covid-19 continúa a nivel mundial, una importante ‘ola’ de turistas acudió a la zona de Miami Beach, Florida, como parte de las vacaciones de primavera.

Las playas llenas de spring breakers se volvieron incontrolables ante la falta de uso de cubrebocas y sana distancia, situación que obligó al alcalde de la ciudad, Dan Gelber, decretar estado de emergencia. 

“Las multitudes que han llegado a la ciudad son más de las que podemos manejar (…) (Los estudiantes llegan) con la intención de no cumplir las reglas, generando un nivel de caos y desorden imposible de controlar por las autoridades”, declaró.

A partir de este fin de semana, se estableció un toque de queda impuesto a las 21:00 horas y durará por “las próximas noches”, por lo que se desconoce una fecha exacta en la que esta orden se levantará.