
En el estado de Pensilvania, Estados Unidos, cientos de personas, incluyendo legisladores simpatizantes del presidente Donald Trump y las armas, se reunieron para protestar contra las medidas de confinamiento implementado para evitar la propagación de casos de coronavirus.
Asimismo, en otras partes de Estados Unidos se registraron protestas, como en Michigan, California y Ohio, las cuales fueron alentadas por el mismo presidente.
Los manifestantes demandan que las órdenes establecidas por los gobiernos de cada región violan las libertades individuales y perjudican la economía, pese que en el país han muerto más de 40 mil personas.
Entre las consignas pintadas se puede leer “Trabajo, no ayuda estatal” y “¡Cuarentena no es libertad!”, mientras tanto, republicanos que se encontraban en el Congreso alentaban a los manifestantes desde las escaleras.
“Nuestra nueva normalidad no significa que sacrificaremos nuestras libertades por la seguridad de nuestro país ¡U-S-A! No es normal recibir ayuda del gobierno para pagar nuestras cuentas", señaló Aaron Bernstine en un discurso.
El gobierno federal comenzó a mandar ayuda económica en algunos hogares, donde les entregaban mil 200 dólares. Asimismo, entre los manifestantes se encontraban activistas conservadores, quienes están a favor de las armas, y celebran protestas contra la cuarentena.
Pese al que estas manifestaciones han llamado la atención en medios de comunicación y redes sociales, el 80 por ciento de la población estadounidense está a favor del confinamiento.