Una de las incógnitas que surgió inmediatamente tras el asesinato de Carlos Manzo quien fuera ex-alcalde de Uruapan el pasado mes de Noviembre, fue quien y como mataron al homicida de Manzo. La primera versión que se oficializó e hizo pública fue la de la Fiscalía General de Michoacán la cual afirmaba que uno de los escoltas de Manzo mató al homicida con la misma arma que le arrebató la vida a Carlos.
Sin embargo, ahora gracias a un peritaje solicitado por la defensa ha determinado que los casquillos son de armas distintas, pues el peritaje balístico concluyó que la bala que exterminó al asesino del ex-alcalde fue disparada con el arma de un escolta.
Por su parte la Fiscalía General de Michoacán aseguró en su versión que los siete disparos que se ejecutaron la noche del 1 de noviembre en la plaza de Uruapan salieron de la misma pistola, una Pietro Beretta 9 milímetros que usó el joven asesino y que tiene la matrícula borrada.
De los siete disparos que se detonaron esa noche, seis iban dirigidos en contra de Manzo pero el último impactó en contra del propio homicida y la Fiscalía señaló al escolta Demetrio de la Cruz quien se encuentra detenido actualmente como el responsable de usar la misma pistola del asesino para fulminarlo.
Pero ahora debido a la petición de la defensa de los escoltas, se realizó un peritaje por medio de un criminalista privado quien analizó los casquillos que las siete balas que tenía en su posesión la Fiscalía.
Donde se revelaron los siguientes descubrimientos: seis de los casquillos son de color gris, tienen las palabras grabadas “Luger Mon” y se etiquetaron como indicios 1, 2, 3, 4, 5 y 7. Mientras que el casquillo que fue etiquetado como indicio 9 es de color dorado, tiene la leyenda “Aguila” grabada y fue encontrada en la jardinera donde los escoltas forcejearon con el homicida. Además el criminalista destacó que el casquillo dorado tiene marcas de disparo distintas a los de color gris.
Por lo que ahora la versión de una sola arma que forma parte de los señalamientos de la Fiscalía en contra de los escoltas queda en duda, aunque el Fiscal sigue asegurando que no hay ningún error en el peritaje de la Fiscalía y ha desestimado el peritaje de la defensa, mientras el jefe de los escoltas de Carlos Manzo se mantiene prófugo.