En los países que desarrollados se encuentran combatiendo el virus, sin embargo, en los que impregna la desigualdad social uno de los mayores problemas es la hambruna.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el 2019 casi uno de cada nueve personas sufrió desnutrición crónica, y esta podría agravarse debido a la pandemia. El año pasado la hambruna afectó a cerca de 690 millones de personas, el 8.9 por ciento de la población mundial.
Este síndrome es una forma de desnutrición, la cual se genera cuando no hay suficiente proteína en la dieta, es común en lugares donde hay hambruna, falta de suministro de alimentos y bajos niveles de educación.
La enfermedad se da principalmente en países muy pobres y está aumentando por los conflictos sociales, cambio climático la crisis económica, a raíz de la pandemia ha ido aumentando.
Las regiones más afectadas sin África y Medio Oriente, pero también se da en países donde hay conflictos bélicos.
Si la enfermedad no se atiende a tiempo, los niños y niñas podrían padecer enfermedades físicas y mentales permanentes, e incluso podrían perder la vida.