Durante “La Mañanera del Pueblo”, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró las declaraciones del ministro español de Asuntos Exteriores, Manuel Albares, quien lamentó el trato hacia los pueblos indígenas durante la Conquista y reconoció ese episodio como un momento de “dolor e injusticia” en la historia compartida entre México y España.
Sheinbaum calificó el gesto como “un primer paso importante” y recordó que fue durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador cuando se inició la petición formal de disculpa al Reino de España por los agravios cometidos en la época colonial.
“Es la primera vez que una autoridad del gobierno español lamenta la injusticia de la Conquista. Pedir perdón no es humillante, al contrario: engrandece a los gobiernos y a los pueblos. Reconocer la historia y los agravios fortalece nuestra memoria y nuestra dignidad”
expresó la mandataria.
Sheinbaum recordó que la carta enviada en 2019 por López Obrador al rey de España fue redactada en tono diplomático y respetuoso, con la intención de construir una nueva etapa de entendimiento histórico entre ambos países. Sin embargo, señaló que la respuesta del gobierno español en ese momento fue negativa y desató una campaña mediática en contra del entonces presidente mexicano y de la Cuarta Transformación.
“Nunca se rompieron las relaciones con España, pero sí hubo un agravio político y mediático hacia México. Hoy vemos un cambio de tono que celebramos y que demuestra que el diálogo y la memoria histórica pueden avanzar”, afirmó.
La presidenta subrayó que este tema es fundamental para el proyecto de la Cuarta Transformación, que busca reivindicar la dignidad y la grandeza de los pueblos originarios.
“Si algo distingue a la Cuarta Transformación es el reconocimiento de la fuerza y la dignidad del pueblo de México. Nuestra historia, nuestras raíces indígenas, son la base de ese humanismo mexicano que hoy queremos proyectar al mundo”, dijo.
Las declaraciones del ministro Albares se dieron durante la inauguración de la exposición “La mitad del mundo. La mujer en el México indígena”, presentada en Madrid y dedicada al papel histórico y actual de las mujeres indígenas.
Sheinbaum leyó el prólogo que ella misma escribió para la muestra, en el que subraya que la Conquista fue un proceso de violencia y despojo, pero también de resistencia cultural.
“La Conquista no fue un encuentro entre iguales. Fue una invasión brutal que intentó destruir culturas, lenguas y modos de vida. Las mujeres indígenas resistieron con su arte, su palabra y su comunidad. Esta exposición celebra su fuerza creadora y su legado como símbolo de resistencia y renacimiento”, señaló.
Un llamado a erradicar el racismo y la discriminación
Finalmente, Sheinbaum reconoció que la discriminación y el racismo contra los pueblos originarios aún persisten y aseguró que su erradicación es una obligación ética.
“El mundo es un crisol de historias, colores y voces. Nadie está por encima de nadie. Honrar a los pueblos originarios implica reconocer los abusos del pasado y del presente. Solo así construiremos un mundo verdaderamente justo”, concluyó la presidenta.