En su visita a la frontera de Estados Unidos con México, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió en su idea de construir una "poderosa barrera de acero" en la para evitar el ingreso de migrantes indocumentados.
“Nos ocuparemos de este problema, construiremos una poderosa barda de acero, hablaremos de acero, de concreto no queremos el muro, tiene que ser de acero, construiremos una barrera en lugar de un muro, no importa cómo lo llamen, tiene que estar”, dijo.
“Este equipo es fantástico, estuvieron en televisión y quien los escuchó no tiene duda alguna de que se aprecia todo el trabajo que hacen, los oficiales de la Patrulla Fronteriza, ¡ustedes son más duros que los demás!", dijo.
Destacó que el tráfico de personas es un problema mundial, pero en el caso de Estados Unidos éste se da en la frontera. Aseguró que el problema es que entre México y Estados Unidos no hay vallas o muros que contengan el tráfico de personas.
“Nos urge un muro, una barrera que les ponga freno. En cuanto la tengamos toda esta gente va a dejar de meterse en nuestro territorio”, confirmó.
“Los demócratas no quieren financiar la seguridad de la frontera, la agenda demócrata de fronteras abiertas incluye dejar a los miles de migrantes en nuestra nación” puntualizó.