La seguridad de una de las propiedades más protegidas del Reino Unido quedó en entredicho tras un audaz robo en la finca del castillo de Windsor. Este incidente involucró a dos ladrones enmascarados que lograron sustraer vehículos de la zona de seguridad mientras los príncipes de Gales, William y Kate, descansaban con sus hijos en su residencia de Adelaide Cottage.
¿Qué ocurrió?
Por la noche, los ladrones escalaron una valla de dos metros para ingresar a **Shaw Farm**, una granja en operación situada dentro del perímetro de seguridad del castillo. Los delincuentes se llevaron una camioneta y un quad rojo (cuatriciclo), utilizando el propio vehículo robado para forzar una de las puertas de salida.
Según fuentes no oficiales, se presume que los ladrones conocían bien el lugar, ya que ejecutaron el robo de manera precisa y sin ser detectados. Sabían la ubicación exacta de los vehículos y eligieron un momento en que la vigilancia parecía menos estricta, lo que sugiere un posible reconocimiento previo del área.
La respuesta de las autoridades
Aunque no se han realizado arrestos hasta ahora, la policía de Thames Valley confirmó que, durante el robo, el rey Carlos III no estaba presente en la residencia. Además, no se reportaron heridos ni se registró contacto directo entre los ladrones y los miembros de la familia real.
La investigación sigue en curso, con las autoridades revisando imágenes de cámaras de seguridad y otros elementos para identificar a los responsables. La falta de una respuesta inmediata al incidente ha generado cuestionamientos sobre la efectividad de las medidas de seguridad en una propiedad tan emblemática.
¿Dónde ocurrió el robo?
El robo tuvo lugar dentro del extenso terreno del castillo de Windsor, específicamente en Adelaide Cottage, la residencia oficial de los príncipes de Gales desde 2022. Esta propiedad de cuatro dormitorios está ubicada dentro de la finca de Windsor y es conocida por ofrecer un ambiente más privado para William, Kate y sus tres hijos: George (11 años), Charlotte (9 años) y Louis (6 años).
¿Cuándo sucedió el robo?
El incidente ocurrió el mes pasado, durante la noche, mientras la familia dormía en Adelaide Cottage. A pesar de la proximidad del robo, no se percataron del mismo hasta después de que los delincuentes abandonaron el lugar.
Repercusiones y análisis
Este incidente ha reavivado los debates sobre la seguridad de las propiedades reales. A pesar de ser una de las residencias más protegidas del país, el castillo de Windsor sufrió una vulneración significativa. Algunos expertos en seguridad sugieren que el uso de tecnologías avanzadas y el aumento de la vigilancia podrían ayudar a prevenir eventos similares en el futuro.
Por otro lado, el robo plantea preguntas sobre la posibilidad de que los ladrones hayan contado con información interna, dado el conocimiento detallado que demostraron. Este tipo de incidentes podría motivar una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad en todas las residencias reales.
La vida continúa para los príncipes de Gales
A pesar del incidente, los príncipes de Gales y sus hijos continúan con sus actividades diarias en Windsor. La familia se ha mostrado tranquila en apariciones públicas recientes, mientras el personal de seguridad refuerza las medidas en la finca para garantizar su tranquilidad.
Este robo, aunque sin víctimas ni grandes pérdidas materiales, sirve como un recordatorio de la constante amenaza a la seguridad que enfrentan las figuras públicas y sus entornos. La respuesta a este incidente será crucial para restaurar la confianza en las medidas de protección de las residencias reales.
Ladrones enmascarados irrumpieron en el Castillo de Windsor mientras el Príncipe William y la Princesa Kate Middleton dormían.
— 🌐EL GRAN DESPERTAR🌐 (@destapandolose1) November 18, 2024
Sí, en Gran Bretaña en 2024, ya no estás seguro incluso si vives en un castillo con un foso, muros y guardias armados, así de malo es.🎯 pic.twitter.com/WHL3rIVZn8