La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) reveló que 13 casinos en distintos estados del país fueron utilizados por grupos del crimen organizado para lavar dinero proveniente de actividades ilícitas, mediante operaciones millonarias en efectivo, transferencias internacionales y el uso de plataformas digitales no reguladas.
Minutos después del anuncio, la Secretaría de Gobernación (Segob) informó la suspensión inmediata de las operaciones de estos centros de apuestas, ubicados en entidades como Jalisco, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Baja California, Estado de México, Chiapas y la Ciudad de México.
De acuerdo con Hacienda, la investigación fue desarrollada durante varios meses en coordinación con el Gabinete de Seguridad, y permitió identificar un entramado financiero que buscaba dispersar, ocultar y reinsertar recursos ilícitos en el sistema financiero mexicano e internacional.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) bloqueó las cuentas bancarias de los establecimientos y presentará denuncias ante la Fiscalía General de la República (FGR), además de dar vista a la Procuraduría Fiscal de la Federación (PFF) para indagar posibles delitos de lavado de dinero, asociación delictuosa y evasión fiscal.
Según la dependencia, los casinos realizaron transferencias hacia países como Estados Unidos, Rumania, Albania, Malta y Panamá, aprovechando plataformas digitales sin supervisión. En estas, se utilizaban personas con perfiles económicos modestos —amas de casa, estudiantes, jubilados y desempleados— para recibir grandes sumas y reenviarlas a los verdaderos beneficiarios, a cambio de una comisión.
Hacienda destacó que la operación representa un golpe financiero al crimen organizado y reafirmó su compromiso de reforzar los mecanismos de vigilancia para impedir que el sistema financiero mexicano sea utilizado con fines ilícitos.