El fenómeno de las auroras boreales, comúnmente visible en las regiones polares, podrá ser capturado en imágenes en el norte de México los días 10 y 11 de octubre, una oportunidad única que se debe a la actividad solar reciente. Según el Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA, este fenómeno se origina a partir de una gran eyección de masa coronal (CME) del Sol, que ha lanzado una nube de plasma y partículas a una velocidad de aproximadamente 4 millones de kilómetros por hora hacia la Tierra. Al interactuar con nuestro campo magnético, se ha generado una tormenta geomagnética que podría provocar la aparición de auroras en zonas tan al sur como el norte de México.
Las auroras boreales se forman cuando partículas cargadas, especialmente electrones del viento solar, son atraídas por el campo magnético terrestre hacia los polos. Allí, interactúan con los gases presentes en la atmósfera, como el oxígeno y el nitrógeno, lo que genera un espectáculo de luces en tonos verdes, rojos, rosados y púrpuras. El color de la luz depende del tipo de gas y la altitud en la que se da la reacción: el oxígeno produce tonos verdes y rojos, el nitrógeno da colores rosados, y el hidrógeno y helio pueden generar luces azules y violetas.
La Tierra experimenta ciclos de actividad solar de 11 años, durante los cuales el Sol tiene periodos de mayor actividad que provocan un aumento en las erupciones solares y las eyecciones de masa coronal. Cuando estas alcanzan nuestro planeta, pueden sobrecargar el campo magnético terrestre, y es entonces cuando es más probable ver auroras en zonas inusuales, como las latitudes medias y bajas.
Aunque las auroras boreales son comunes en el hemisferio norte, principalmente en lugares como Alaska, Canadá, Escandinavia y Rusia, también pueden verse ocasionalmente en latitudes más bajas si la tormenta solar es especialmente intensa. De hecho, en mayo de 2024, algunas regiones del norte de México lograron observar este fenómeno, aunque fue necesario el uso de cámaras de alta sensibilidad y de larga exposición para capturar la aurora.
En esta ocasión, meteorólogos prevén que las auroras podrán apreciarse, con ayuda de la tecnología, en estados como Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Además, algunos especialistas no descartan la posibilidad de que también puedan ser visibles en algunas zonas del sur de México, como Yucatán. Sin embargo, a diferencia de las auroras boreales visibles en los polos, las auroras en México no podrán observarse a simple vista y requerirán cámaras de larga exposición o lentes especializados para capturar los destellos de luz en el cielo.
La tormenta geomagnética que se espera estos días es de nivel 4 en la escala de la NOAA, lo que indica una actividad significativa, aunque no peligrosa. Esta tormenta se produce a partir de la interacción de la eyección de masa coronal del Sol con el campo magnético de la Tierra, creando variaciones intensas en la magnetósfera que permiten la entrada de partículas solares.
Estas partículas no suelen presentar un riesgo grave para la Tierra; sin embargo, pueden afectar ciertas infraestructuras tecnológicas, como los sistemas de comunicación y los satélites. Afortunadamente, en esta ocasión, los expertos han señalado que no se espera una interrupción considerable en las comunicaciones o sistemas eléctricos en el planeta.
Según Shawn Dahl, meteorólogo del Centro de Predicción Meteorológica Espacial de Estados Unidos, la llegada de la tormenta geomagnética podría extenderse desde el jueves 10 de octubre por la mañana hasta el mediodía, y probablemente continuaría durante el día siguiente. Durante este periodo, quienes se encuentren en las zonas de mayor latitud y lejos de las luces de las ciudades tendrán mayores probabilidades de observar este fenómeno, incluso aunque sea a través de dispositivos.
Hoy en día, el avance en la tecnología de las cámaras digitales permite capturar eventos que son imperceptibles para el ojo humano. Para los residentes del norte de México que desean intentar observar las auroras, es esencial encontrar un lugar con el menor nivel de contaminación lumínica posible y usar cámaras en modo de larga exposición. Esto permitirá que las cámaras capten la luz emitida por las auroras, que de otro modo sería demasiado tenue para ser vista sin ayuda.
Además, los teléfonos celulares con funciones de larga exposición y aplicaciones de fotografía de astrofotografía pueden ser de gran ayuda para lograr imágenes claras y nítidas de este fenómeno.
Las auroras boreales, también conocidas como luces del norte, son un espectáculo único que nos recuerda la grandeza y belleza de la naturaleza. Aunque este evento pueda no ser tan espectacular como las auroras en latitudes altas, sigue siendo una oportunidad para que los mexicanos experimenten uno de los fenómenos naturales más maravillosos del planeta, especialmente en un país donde rara vez pueden observarse.
Como destaca la Universidad Nacional Autónoma de México, las auroras polares son fenómenos luminosos que ocurren en la alta atmósfera debido a la interacción de las partículas solares con el campo magnético terrestre. Las auroras boreales, visibles en el hemisferio norte, y las auroras australes, que ocurren en el hemisferio sur, representan un vínculo directo entre la actividad solar y la Tierra, un recordatorio fascinante de la interconexión de nuestro planeta con el cosmos.