Elementos de la Cruz Roja evacuaron a las víctimas para ser atendidas, mientras que los cuerpos permanecían en el suelo de la prisión Tangerang.
Los convictos que se encontraban en el lugar en su mayoría, cumplían condenas por delitos relacionados con drogas, incluyendo a dos extranjeros procedentes de Sudáfrica y Portugal.
Una de las personas que murieron estaba condenada por terrorismo y otra por asesinato, así lo señaló Yasonna Laoly, ministro de Justicia y Derechos Humanos de Indonesia.
“Esta es una tragedia que nos atañe a todos. Trabajamos estrechamente con todas las partes relevantes para investigar las causas del incendio”, dijo.
El incendio se originó alrededor de la 1:45 horas, se produjo por un corto circuito en una de las 19 celdas del Bloque C2, donde había 122 reclusos.
Cuando se controló el fuego, arribaron al lugar cientos de policías y soldados para evitar que los reclusos escaparan.
Ocho de los reos presentan quemaduras severas y otros nueve quemaduras leves, mientras que 64 sufrieron inhalación de humo.
Imagen de 'Reuters'.
