Lorenza Cano Flores buscaba desde 2018 a su hermano… Lo digo en pasado porque el 15 de enero hombres armados entraron a su casa en Salamanca, Guanajuato, y se la llevaron… Su esposo y su hijo lo quisieron evitar, pero los mataron… Hoy, Laura, la hija de Lorenza, no sólo sobrevive con el dolor atravesado de la familia que le arrebataron… También se ha dado cuenta de algo… Ella es la única que puede evitar que la búsqueda de su tío y su mamá se convierta en un grito en el fondo del mar… Y lo sabe porque ella vive hace mucho el abandono del Estado a las familias buscadoras… El caso de Lorenza Cano Flores es la peor de las pesadillas para las víctimas de desaparición en México… Porque como dije al inicio, se trata de un daño expansivo… Lorenza o Lore, como la conocen en el colectivo “Salamanca unidos buscando desaparecidos”, estaba desde 2018 buscando a su hermano José Francisco Cano Flores, pues hombres armados irrumpieron en su casa un 17 de agosto y se lo llevaron… Ahí comenzó la búsqueda, pero Lore no podía dedicar todos sus días a esa labor por un problema que tiene en la cadera y que le impide moverse normalmente, según contó al diario “El País” una de sus compañeras… Pero quien estaba al cien en la búsqueda en tierra era su hija Laura… Ahora, esa tarea se ha duplicado… Medios locales afirman que en la casa de Lorenza, en Salamanca, estaban ella, su esposo Miguel de 54 años que visitaba México porque él trabajaba en Estados Unidos… Y también estaba Miguel Ángel, hijo de ambos de apenas 24 años… Y que la noche del 15 de enero un grupo armado entró a la casa y se llevó por la fuerza a Lore… Miguel y Miguel Ángel fueron asesinados cuando lo intentaron impedir… El colectivo al que pertenece Lore tuvo que hacer una cosa desgarradora… Una ficha de búsqueda para una de las suyas… Y estoy segura que los cuestionamientos, las dudas, el preguntarse por qué Lore… O peor aún, si alguna de ellas podría ser la siguiente, estuvieron y están presentes en las conversaciones del colectivo de búsqueda de Salamanca… No es para menos, porque eso es lo que ha provocado la claudicación del Estado en su tarea por proteger a las buscadoras, por darles justicia, por entregarles a ese hijo, hermano, esposo que les quitaron…