La industria cinematográfica fue una de las más afectadas por la pandemia de Covid-19. Las restricciones sanitarias, que obligaron al cierre temporal de las salas en todo el mundo, generaron pérdidas millonarias y cambiaron la dinámica de consumo audiovisual. Aunque han pasado varios años desde los momentos más críticos, las taquillas globales aún no alcanzan los niveles registrados antes de 2020.
Desde 2021, la recaudación por venta de boletos ha mostrado una recuperación gradual, aunque a un ritmo más lento de lo esperado. Durante 2024, las taquillas alcanzaron aproximadamente 30,500 millones de dólares a nivel mundial, según datos de Gower Street Analytics. Si bien esta cifra representa una mejora frente a los años inmediatos posteriores al inicio de la pandemia, está lejos de los 42,300 millones de dólares recaudados en 2019, el último año completo previo al impacto global del Covid-19.
Para 2025, las proyecciones son optimistas, pero limitadas. Se espera que las taquillas mundiales alcancen una recaudación de 33,000 millones de dólares, lo que todavía deja un margen considerable respecto a los niveles prepandémicos. Esta lenta recuperación responde a múltiples factores, entre ellos, cambios en los hábitos de consumo, el auge de las plataformas de streaming, y la reconfiguración del modelo tradicional de estrenos cinematográficos.
El impacto del streaming y los cambios en la audiencia
Uno de los efectos secundarios de la pandemia fue el fortalecimiento de las plataformas de streaming como principales competidores de las salas de cine. Durante los confinamientos, servicios como Netflix, Disney+, Amazon Prime Video y HBO Max experimentaron un auge sin precedentes, atrayendo a millones de suscriptores y consolidándose como alternativas para disfrutar de contenido audiovisual en casa.
Este cambio afectó de manera directa la asistencia a los cines, especialmente para producciones de mediana o baja escala, que encontraron en el streaming una plataforma más viable para llegar al público. Aunque los grandes blockbusters han logrado convocar a audiencias significativas en los cines, muchos espectadores aún optan por la comodidad y accesibilidad de las plataformas digitales.
Regiones con ritmos de recuperación dispares
La recuperación del sector no ha sido homogénea. En mercados como Asia y América del Norte, la asistencia a salas de cine ha mostrado una mayor resiliencia, impulsada principalmente por producciones locales y éxitos taquilleros. Por ejemplo, China y la India han liderado la recaudación en sus respectivas regiones, gracias a la fortaleza de sus industrias cinematográficas nacionales y a un sólido apoyo del público local.
En cambio, en Europa y América Latina, la recuperación ha sido más lenta. En estos mercados, factores económicos, culturales y sociales han influido en la dificultad de atraer a las audiencias de regreso a las salas. La inflación, la devaluación de monedas locales y las nuevas preferencias de los consumidores han planteado desafíos adicionales para los exhibidores.
Nuevas estrategias para reactivar el sector
Ante este panorama, la industria cinematográfica ha implementado diversas estrategias para fomentar la asistencia a las salas de cine. Los distribuidores y exhibidores están apostando por experiencias inmersivas, como las proyecciones en formatos IMAX y 4DX, y eventos especiales que solo pueden disfrutarse en cines. Además, se han impulsado campañas de marketing más agresivas para destacar las ventajas de la experiencia comunitaria del cine frente al consumo individual en plataformas.
Por otro lado, algunos estudios han comenzado a adoptar modelos híbridos, combinando estrenos simultáneos en cines y plataformas de streaming, lo que permite un alcance más amplio sin abandonar por completo el circuito tradicional. Sin embargo, este enfoque sigue siendo objeto de debate, ya que puede afectar la exclusividad que solía caracterizar a los lanzamientos cinematográficos en salas.
Un futuro lleno de retos y oportunidades
Aunque la pandemia transformó el panorama de la industria, el cine sigue siendo un elemento clave en la cultura popular. A medida que los exhibidores y productores se adaptan a los nuevos tiempos, se mantienen los retos de recuperar por completo las taquillas mundiales.
El camino hacia la plena recuperación económica de los cines será largo y requerirá una visión innovadora, además de un esfuerzo conjunto entre la industria, el público y los gobiernos. Por ahora, el cine sigue demostrando su capacidad de resistencia y su importancia como experiencia colectiva.
